El queso manchego es uno de los productos gastronómicos de España que más se vende en todo el mundo: el 70% de todo el queso que se produce con esta denominación de origen se exporta a unos 100 países. Por esta razón, este preciado alimento puede ser víctima de fraudes en la industria alimentaria: es posible encontrar en muchos puntos de venta quesos que se hacen llamar manchegos, pero que no cuentan con las condiciones para recibir esta denominación.
El presidente de la Denominación de Origen del queso manchego, Antonio Martínez explica en este artículo de EL ESPAÑOL que, frecuentemente, el término "manchego" se confunde con un gentilicio. En realidad, la denominación "no se otorga por ser elaborado en La Mancha, se concede por ser leche de ovejas de raza manchega. Confunden al consumidor cuando se usa el término manchego como lugar de origen".
Actualmente sólo existen 185.000 ovejas de esta raza y los ejemplares que producen leche sólo lo hacen durante los 60 días posteriores al parto que, a su vez, se trata de un evento que sucede cada ocho o nueve meses. "Cada oveja puede llegar a producir entre litro y medio y dos litros de leche diaria y, para cada queso, son necesarios seis, que además tienen que pasar un proceso de maduración de entre 30 y 60 días".
La indignación de Chicote
Es decir, que con los millones de quesos manchegos que podemos encontrar en el mercado mundial, está claro que muchos de ellos no pertenecen a la denominación de origen. El famoso chef Alberto Chicote ha dado con uno de estos quesos que puede llevarnos a error. El cocinero, que saltó a la fama por sus encendidos cabreos gastronómicos en el programa Pesadilla en la cocina, se ha llevado las manos a la cabeza con uno de estos manchegos.
En la fotografía, sostiene un queso de la marca Cacique y que anuncia en su etiquetado con grandes letras rojas que se trata de un manchego de estilo mexicano. En el etiquetado se puede observar que ha sido producido en Estados Unidos con leche de California —vamos, a más de 9.000 kilómetros de La Mancha—. Pero, ¿es posible que hayan llevado ovejas manchegas hasta ahí para producir este queso? Pues no.
De hecho, este queso hecho en Estados Unidos con alma mexicana se ha elaborado con leche de vaca. En este punto es posible que muchos españoles se estén tirando de los pelos, pero todo tiene una explicación: "El manchego es uno de los quesos con más historia del mundo. Su origen se encuentra en la región de La Mancha en España y se hace con la leche de ovejas de raza manchega. La versión mexicana viene de la influencia de España y se hace con leche de vaca, en vez de oveja", explica la marca Cacique en su página web.
Parientes lejanos
En resumen, este queso no se puede considerar un caso de fraude, sino que, más bien, el manchego hace referencia a un producto muy diferente en México. Si bien en dicho texto se reconoce que el origen es puramente español, la versión mexicana del manchego ha derivado en un queso parecido a la mantequilla. De hecho, en el etiquetado del queso Cacique se dice que este se derrite sobre comfort food —el término con el que los estadounidenses se refieren a alimentos muy ricos en azúcares o carbohidratos, como los nachos—. Es decir, nada que ver con el manchego selecto que conocemos.
El término manchego, de hecho, ha sido motivo de conflicto entre la Unión Europea y México hace unos años a cuenta de la renovación del Tratado de Libre Comercio entre ambas regiones del año 1997. El hecho de que en el mercado americano se conozca como manchego a un producto menos selecto, podría afectar a la denominación de origen española y europea en dicho continente. Por eso, es posible encontrar que muchos de estos quesos de receta mexicana se autodenominen como queso tipo manchego.
Aunque reconocen que el nombre deriva del queso español, los mexicanos no quieren renunciar a él porque, según este artículo de El País, el 97% del queso manchego que se come en México es la versión mexicana. Además, se trata de un producto muy popular y que se conoce con este nombre desde siempre. En México existen también otros quesos con nombre europeo que, sin embargo, no se parecen nada a ellos: cuentan con su propio parmesano, su propio feta… y la Unión Europea se encuentra en negociaciones por todos estos nombres.
Distintos nutrientes
Por tanto, aunque no se trata de un caso de fraude al uso porque no intenta copiar la receta, más de un consumidor podría llevarse una sorpresa si se lleva un manchego mexicano esperando consumir uno español. Chicote, por su parte, ha asegurado que no ha comprado este producto y ha declarado que, para él, es un "nuevo nominado al desastre con más desfachatez del mundo", entendiendo que los términos "manchego" y "mexicano" son incompatibles. Muchos de sus seguidores se han mostrado igualmente indignados.
En cualquier caso, no podemos esperar la misma composición nutricional entre el manchego español y el de México. La Fundación Española de la Nutrición (FEN), calcula que el queso manchego tiene unas 420 kilocalorías por cada 100 gramos —la ración de este alimento se establece en 40 gramos que a su vez aportan 160 kilocalorías—. Este queso de Estados Unidos, sin embargo, contiene poco más de 320 kilocalorías por cada 100 gramos: ellos calculan una ración de 28 gramos en la que habría 90 kilocalorías.
Una de las razones por las que este queso tiene menos calorías es que emplea leche semidesnatada y, por tanto, aporta el aporte de grasas es inferior. En concreto, mientras que el manchego español contiene un 32% de grasas, el de la marca Cacique aporta un 25%. En ambos casos, las grasas saturadas son las más abundantes, como pasa con todos los lácteos. Sin embargo, varios estudios confirman que la grasa de los lácteos no es peligrosa, siempre y cuando esos lácteos no sean productos ultraprocesados.
Para que un queso sea considerado saludable debe llevar sólo como ingredientes leche, sal y fermentos lácticos. En el caso de los quesos con más calorías, como es el caso del queso manchego español y este queso de Estados Unidos, se debe limitar su consumo. El queso manchego original es un alimento saludable y este queso americano también, ya que sólo contiene leches, sal marina y enzimas. Si lo consumimos de manera moderada, no tiene por qué afectar a nuestra salud.