El magnesio es un elemento esencial para la vida, además de un mineral necesario en cualquier tipo de dieta. Debe mantenerse un equilibrio en su consumo, ya que tanto el exceso como el déficit son perjudiciales. Y si bien es cierto que los suplementos de magnesio son muy populares hoy en día, una correcta alimentación debería ser suficiente como para proporcionarnos la cantidad necesaria.
Ahora, un nuevo estudio publicado en la revista European Journal of Nutrition plantea que cumplir con las dosis óptimas de magnesio según las guías clínicas sería mejorable. Deberíamos aumentar un poco más si cabe las raciones recomendadas, siempre evitando los excesos, para poder desbloquear sus mayores beneficios.
Esta es la conclusión del nuevo trabajo llevado a cabo por los científicos del Laboratorio de Neuroimagen y Cerebro de la Universidad Nacional de Australia (ANU). A mayor ingesta de magnesio a través de alimentos ricos en este mineral como las espinacas o los frutos secos, mejor salud cerebral y menor riesgo de demencia.
[Magnesio: así puedes incluir en tu dieta el mineral necesario para 300 reacciones bioquímicas]
La demencia en edades avanzadas es la séptima causa de muerte a nivel mundial, pero en países desarrollados como Australia ya es la segunda causa. Se calcula que la cantidad de personas diagnosticadas de demencia llegará a duplicarse e incluso triplicarse para 2050. Pasaremos de los 57,4 millones de personas diagnosticadas durante 2019 hasta los 152,8 millones de personas en 2050, algo que aumentará la presión en los servicios sociales y de salud, y a su vez en la economía mundial.
Para el estudio, los investigadores analizaron a más de 6.000 participantes cognitivamente sanos de Reino Unido, de 40 a 73 de años, en función de su consumo de magnesio. Todos completaron un cuestionario online cinco veces durante un periodo de 16 meses. Gracias a sus respuestas, basadas en 200 alimentos diferentes y sus raciones, se pudo calcular la ingesta aproximada de magnesio. El equipo de investigadores se centró en los alimentos ricos en este mineral, como verduras de hoja verde, legumbres, frutos secos, semillas y cereales integrales.
Según los resultados, aquellas personas que consumen más de 550 miligramos de magnesio al día tendrían una edad cerebral un año más joven cuando llegan a los 55 años en comparación con una ingesta "normal" de unos 350 miligramos diarios, como se recomienda hoy en día.
Como explica Khawlah Alateeq, autora principal del estudio e investigadora de doctorado en el Centro Nacional de Epidemiología y Salud de la Población de la ANU, "el estudio muestra que aumentar un 41% la ingesta de magnesio podría conducir a una menor contracción cerebral relacionada con la edad. Esto se asociaría con una mejor función cognitiva y un menor riesgo o retraso en la aparición de la demencia en la vejez"
Los investigadores recuerdan que actualmente no existe una cura para la demencia, y el desarrollo de tratamientos farmacológicos no ha dado con una solución en los últimos 30 años. Es por tanto esencial prestar más atención a la prevención mediante buenos hábitos de vida. Esta, como otras investigaciones previas relacionadas, abogaría por potenciar las intervenciones de salud pública destinadas a promover un envejecimiento cerebral saludable a través de estrategias dietéticas.
En este aspecto, los investigadores sugieren que una mayor ingesta de magnesio a nivel dietético desde una edad más temprana puede protegernos contra enfermedades neurodegenerativas y el deterioro cognitivo a partir de los 40 años. "El estudio muestra que una mayor ingesta de magnesio en la dieta puede contribuir a la neuroprotección durante el proceso natural de envejecimiento. Esto significa que las personas de todas las edades deberían prestar atención a su ingesta de magnesio".
Además, los investigadores también detectaron que los efectos neuroprotectores del magnesio dietético parecían beneficiar más a las mujeres que a los hombres, y más si cabe a las mujeres posmenopáusicas que a las premenopáusicas, algo que podría deberse al efecto antiinflamatorio del magnesio.