Aunque ya en anteriores investigaciones se han demostrado los beneficios cerebrales del ejercicio físico, incluso siendo recomendado como un tratamiento y método preventivo de dolencias como la enfermedad de Alzheimer, hasta ahora esta relación no se había podido demostrar a nivel físico: no se sabía qué tejido cerebral llevaba a cabo dichos beneficios.
Ahora un reciente trabajo publicado en la revista NeuroImage afirma que sí existe una estructura cerebral responsable de este proceso, concretamente una microestructura localizada en el hipocampo, una región cerebral implicada en la memoria.
Ejercicio físico y memoria
Para llegar a tal conclusión, los investigadores de la Universidad de Illinois, dirigidos por Hillary Schwarb y Curtis L. Johnson, evaluaron a 51 adultos jóvenes sanos mediante una técnica de neuroimagen específica -la elastografía por resonancia magnética- para analizar la estructura del hipocampo. Asimismo, también se analizaron los resultados de pruebas de aptitud y memoria.
Los investigadores detectaron viscoelasticidad en el hipocampo de forma directamente relacionada con las pruebas de aptitud y memoria.
La viscoelasticidad, según refiere el coautor del estudio Curtis L. Johnson, es una propiedad de los tejidos que comparten la propiedad elástica -como la espuma de un colchón firme- y la viscosidad -como un colchón de espuma con "memoria"-. En este caso se detectó que a mejor condición física, mayor elasticidad -en lugar de viscosidad- del hipocampo y mejor memoria.
En este caso nos encontraríamos delante de un estudio pionero, ya que en investigaciones anteriores se ha analizado el tamaño del hipocampo para relacionarlo con la memoria; en este caso, se ha analizado la estructura interna de esta región cerebral, mediante una técnica de resonancia magnética especial.
Durante el estudio también se detectaron otras relaciones, además de la correlación entre mejor condición física y memoria: los individuos que disfrutaban de una mejor salud cardiovascular, también poseían un tejido del hipocampo más elástico.
Finalmente, los investigadores también afirman que la técnica de neuroimagen usada para el estudio, la elastografía por resonancia magnética, podría ser muy útil para comprender las microestructuras cerebrales aún no estudiadas, u otro tipo de tejidos del organismo, con el objetivo de mejorar el diagnóstico y tratamiento de diversas enfermedades actuales.