Los Servicios Nacionales de Salud del Reino Unido (National Health Service) han dado la voz de alarma: hasta cuatro de cada cinco adultos poseerían un corazón "más viejo" que la edad biológica que les correspondería, una situación que aumentaría el riesgo de muerte prematura en más del 75% de la población adulta. Estos datos surgen tras la realización del test, disponible en la página web oficial del NHS, por parte de 1,9 millones de individuos.
Según apunta The Guardian, estos datos serían una llamada de atención para que los británicos abandonasen el actual estilo de vida poco saludable que campa a sus anchas por ambas islas y, de paso, podrían servir para reducir el riesgo de sufrir un infarto cardíaco o un ictus. A su vez, cabe destacar que en España la situación no es muy diferente, dado que recientemente un estudio independiente centrado en nuestro país alertó de que hasta un 26% de los adultos españoles no realiza suficiente ejercicio, destacando sobre todo el caso de las mujeres sobre los hombres.
Poseer un corazón más viejo que la edad biológica real de un individuo es, según los expertos del NHS, "realmente alarmante", siendo suficiente razón para focalizar la atención en los elevados índices de tabaquismo, obesidad e inactividad física de Reino Unido y el resto de países occidentales.
En total, un 78% de los 1,9 millones de individuos que realizaron el test del NHS obtuvieron una edad del corazón mayor a la que les correspondería cronobiológicamente. Hasta un 34% de los encuestados poseían un corazón cinco años superior a su edad real, y hasta el 14% poseían un corazón con 10 años más de la edad biológica correspondiente. Según el NHS, poseer una edad cardíaca superior a la real, a cualquier nivel, implicaría un mayor riesgo de discapacidad temprana o muerte prematura.
Una llamada de atención, pero no al pánico
Según declaraciones de la profesora Helen Strokes-Lampard a The Guardian, conocer estas cifras no tiene como objetivo alarmar a la población, sino más bien llamar la atención sobre la necesidad de mejorar el estilo de vida en general, dados los elevados niveles de obesidad y otros problemas asociados, como los elevados niveles de presión arterial, colesterol elevado, consumo de alcohol y/o tabaco e inactividad física.
De hecho, según datos de los expertos del NHS, se podrían salvar una media de 50 vidas diarias en Inglaterra si se adoptasen mejores conductas a nivel de estilo de vida, dado que cuatro de cada cinco infartos de corazón o ictus son prevenibles.
El problema radica en que cada persona debe asumir una importante responsabilidad individual: cada uno es responsable de su salud, de mantener unos correctos niveles de tensión arterial, colesterol, azúcar sanguíneo y otros parámetros de salud; no toda la responsabilidad recae en el sistema nacional de salud, ni en Reino Unido, ni en España.
Nunca es tarde para dejar de fumar, hacer ejercicio, evitar el alcohol, perder peso y controlar cualquier parámetro de salud. Sobre todo, en el caso de los hombres, cuyos corazones suelen ser más frágiles que los de las mujeres, según datos de la encuesta: solo el 19% de las mujeres de más de 60 años y el 33% de las mayores de 70 años tenían un corazón 10 años mayor a la edad real. Por su parte, hasta el 31% de los hombres mayores de 60 años y hasta el 42% de los hombres mayores de 70 años tenían un corazón con una década más de vida de lo que debían.