La Organización Mundial de la Salud (OMS) iba a decidir este miércoles si declarar el nuevo virus 2019-nCoV como emergencia de salud pública de interés internacional, lo que supone reconocer que el coronavirus que provoca la bautizada como gripe de Wuham -ciudad donde se desarrolló el brote y donde han fallecido las 17 víctimas mortales hasta la fecha- es una amenaza y que se necesita coordinación internacional para lidiar con ella.
Sin embargo, al filo de las nueve de la noche, su director, Tedros Adhanom Ghebreyesus, se dirigía a los periodistas para explicar que la decisión se retrasaba hasta este jueves, ya que había decidido volver a convocar para mañana a los 15 miembros del Comite de Emergencia sobre Regulaciones Internacionales de Salud de la OMS y seis asesores especializados en distintos campos relacionados con la nueva enfermedad, ninguno de ellos español, que se han pasado reunidos buena parte del día en los cuarteles generales de la OMS en Ginebra, Suiza.
Adhanom ha declarado que se toma "muy en serio" este tipo de decisiones y que había gente de la OMS en "el terreno" para recabar más información sobre el asunto. "Sin duda, mañana sabremos mucho más", puntualizó.
La última vez que la OMS declaró una emergencia de este tipo fue con el brote de ébola del Congo del pasado verano. Otras ocasiones en las que se ha llegado a este extremo han sido el brote de H1N1 asociado a la famosa gripe A y el virus del Zika.
El mismo día que la OMS decidía sobre esta cuestión, también se ha pronunciado el Centro Europeo de Enfermedades Infecciosas (ECDC). Su directora, Andrea Ammon, ha declarado que los últimos acontecimientos han demostrado que el nuevo coronavirus está causando brotes localizados potencialmente impactantes en el sistema sanitario y otros contextos.
Asimismo, considera que es probable que el virus se expanda de forma global. Para este organismo la probabilidad de casos importados a países de la Unión Europea es "moderada", pero ésta se eleva en los países con mayor volumen de personas viajando a y desde la ciudad china de Wuhan. Eso sí, aclara que sólo tres aeropuertos europeos tienen vuelos directos con la ciudad.
También destaca que, por el momento, hay gran incertidumbre sobre la mortalidad y la morbilidad de la neumonía que provoca el virus y que se necesitan "urgentemente" más datos epidemiológicos para entender mejor al virus.