Un estudio serológico coordinado por ISGlobal, centro impulsado por la Fundación La Caixa, y el Hospital Clínic de Barcelona, revela que el 11,2% del personal sanitario de este último ha sido infectado por el nuevo coronavirus, SARS-CoV-2. En España existen más de 41.000 de estos profesionales notificados como infectados por el patógeno.
"Este es el primer estudio que mide la prevalencia de anticuerpos contra el SARS-CoV-2 en una muestra representativa de personal sanitario en un país con elevada carga de la enfermedad", declara Alberto García-Basteiro, investigador de ISGlobal, médico en el Servicio de Salud Internacional del Hospital Clínic y uno de los coordinadores del estudio SEROCOV-1.
El verdadero porcentaje de personas infectadas por el SARS-CoV-2 sigue siendo una gran incógnita en esta pandemia, ya que la infección por dicho virus provoca una gran variedad de síntomas —desde imperceptibles hasta muy graves. "Conocer la prevalencia de la infección en el personal sanitario es particularmente importante, ya que permite además determinar el riesgo de la exposición en dicho colectivo y tomar medidas para disminuirlo", añade García-Basteiro, primer autor del estudio.
El equipo investigador midió anticuerpos dirigidos contra una de las proteínas del SARS-CoV-2 en muestras de sangre de 578 personas que trabajan en el Hospital Clínic. Para ello, desarrollaron un ensayo inmunológico propio utilizando una tecnología llamada Luminex, que permite cuantificar diferentes tipos de anticuerpos (IgA, IgM e IgG) con una elevada fiabilidad y frente a múltiples antígenos al mismo tiempo. "La ventaja de este ensayo es que podemos aumentar la sensibilidad del test midiendo anticuerpos de diversos tipos y frente a otros antígenos virales, ya que la aparición de cada tipo de anticuerpo es distinta y la respuesta puede variar entre individuos", explica Gemma Moncunill, investigadora de ISGlobal que comparte la autoría principal del estudio. En paralelo, realizaron un diagnóstico por PCR en muestras nasofaríngeas para detectar infecciones activas.
Los resultados revelan que, de las 578 personas analizadas, 14 tenían una infección activa (PCR positiva) en el momento del inicio del estudio, 39 habían sido diagnosticadas por PCR antes de acceder al ensayo y 54 habían desarrollado anticuerpos frente al virus (signo de infección pasada o reciente). De estas 54 personas, 21 (es decir, el 39%) no habían sido diagnosticadas en el momento de la infección y alrededor de la mitad de estas personas no diagnosticadas no llegó a presentar ningún síntoma de COVID-19. El total de personas que mostraron evidencias de infección, ya fuese por PCR y/o por serología, fue de 65, es decir un 11,2%.
Se detectaron anticuerpos sobre todo a partir de los 10 días de la aparición de síntomas, y se observó que las inmunoglobulinas de tipo IgA podrían detectarse un poco antes que las de tipo IgM e IgG.
"Considerando que las y los trabajadores sanitarios son un colectivo de alto riesgo, es probable que la seroprevalencia en la población esté incluso por debajo del 11% y aún lejos del umbral de inmunidad de rebaño necesario, estimado alrededor del 60%. En cualquier caso, aun desconocemos si la presencia de anticuerpos proporciona una protección frente a posibles reinfecciones", señala Carlota Dobaño, investigadora de ISGlobal y autora sénior del estudio.
Tomando en cuenta los datos de un hospital de Madrid, donde casi el 12% del personal sanitario ya había resultado positivo por PCR a finales de marzo, y un modelo matemático que estimaba que el 15% de la población española estaba infectada, la seroprevalencia observada en este estudio es menor de la que se esperaba. Sin embargo, el equipo investigador admite que es probable que este estudio no sea representativo de otros hospitales en España, ya que el Hospital Clínic implementó una serie de medidas preventivas de manera más precoz.
"El hecho de que casi un 40% de las infecciones en personal sanitario no fuesen diagnosticadas subraya la importancia de realizar tests de PCR a todo el personal, hayan o no desarrollado síntomas, con el fin de reducir el riesgo de transmisión del virus en el contexto hospitalario", subraya Alfredo Mayor, investigador de ISGlobal y también autor sénior de la investigación. Este estudio se encuentra pendiente de revisión por pares y ha sido publicado de manera preliminar en un repositorio de pre-prints.
Para poder llevar a cabo SEROCOV-1 fue necesario utilizar fondos propios del Instituto de Salud Global de Barcelona. En este sentido, ISGlobal ha habilitado un formulario para la recepción de donativos con los que contribuir a financiar los 50 estudios sobre coronavirus diseñados por el equipo científico