Tal y como se sospechaba, la España vacía ha sido la más golpeada por la infección por el nuevo coronavirus Sars CoV-2, según los resultados preliminares del Estudio Nacional de Seroprevalencia del virus (bautizado como ENECovid19), diseñado por el Ministerio de Sanidad y el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) con la colaboración del Instituto Nacional de Estadística (INE) y las Comunidades Autónomas.
Cuatro provincias de las dos Castillas son las que registran los porcentajes más altos de personas expuestas al virus. Ocupa el primer puesto Soria, seguida de Cuenca, Segovia y Albacete. Madrid, con una porcentaje de infectados del 11,2 %, ocupa la quinta posición.
De estas provincias, sólo Cuenca pasó a fase 1 de la desescalada este lunes, mientras que las otras cuatro continúan en fase 0, aunque -que se sepa- al menos Madrid ha pedido su paso a la siguiente fase para este lunes 18 de mayo.
Por su parte, las provincias menos castigadas por el virus han sido las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, Murcia y Huelva, seguidas por Cádiz. Todas ellas disfrutan ya de la fase 1 de la desescalada.
Los primeros resultados del trabajo, que sus responsables han definido como "uno de los más ambiciosos" demuestra la marcada variabilidad geográfica del virus. De hecho, la provincia más afectada multiplica por 13 los casos registrados en la que menos prevalencia se ha observado.
Estos resultados corresponden sólo a la primera de las tres oleadas de la investigación, por lo que podrían cambiar cuando el trabajo concluya, pero da algunos datos interesantes que, según el ministro Illa, "servirá para evaluar las decisiones tomadas".
De hecho, en la rueda de prensa de presentación de los mismos, el responsable de Sanidad ha comentado que estos demostraban que se iba "en buena dirección".
Por comunidades autónomas, existe una marcada variabilidad geográfica. Así, Ceuta, Murcia, Melilla, Asturias y Canarias presentan prevalencias inferiores al 2%, mientras las Comunidades de Castilla-La Mancha y Madrid superan el 10%. En los mapas provinciales, destaca la agrupación central de provincias con prevalencias iguales o próximas al 10% en el entorno de Madrid.
En esta primera fase se han realizado llamadas telefónicas a 35.000 hogares de toda España elegidos al azar. En paralelo, se ha ido tomando muestras a los participantes en los centros de salud y domicilios.
Por una parte, se les ha hecho un test rápido de determinación de anticuerpos en sangre, mediante un pinchazo en el dedo. Para asegurar la fiabilidad de los resultados y aplicar el máximo rigor metodológico, se ha obtenido de forma adicional muestras de sangre por venopunción (pinchazo en el brazo), en aquellos participantes que han dado su consentimiento.
Los primeros resultados del estudio alejan la posibilidad de que en España se haya adquirido inmunidad de grupo o de rebaño, una circunstancia que favorecería un menor contagio del coronavirus si hubiera un rebrote de casos o una segunda oleada de la pandemia. Para que esto hubiera ocurrido así, se tendría que haber registrado una seroprevalencia aproximada de un 60%.