El coronavirus Sars CoV-2 está disminuyendo en España a la espera de un rebrote y una segunda oleada que casi ningún experto excluye como próximo escenario todavía sin fecha.
Pero mientras las cifras que dan el Ministerio y las comunidades autónomas son cada vez más optimistas, este lunes 18 de mayo 15 personas más ingresaban en las UCI de los hospitales españoles, 15 personas de las que, según las estadísticas, pueden fallecer aproximadamente tres y que se suman al resto de ingresados en cuidados intensivos por esta razón, muchos desde hace semanas.
Sin tratamientos que se sepan eficaces al 100%, los especialistas hacen todo por salvar su vida. Ahora, según publica The New York Times, un método simple, barato y antiguo se ha demostrado útil para mejorar su pronóstico.
El truco es colocar a los pacientes en posición decúbito prono o pronar a los enfermos, que no es otra cosa que colocarles tumbados sobre su estómago, boca abajo y con la cabeza ladeada.
Normalmente, los pacientes respiratorios están tumbados sobre su espalda, una posición que ayuda a los enfermeros a atenderlos y que permite a los enfermos observar su entorno si están despiertos.
Pero ahora se ha visto que este pronado mejora la respiración a los que sufren el temido distrés respiratorio, una de las consecuencias más graves del Covid-19.
El concepto se apoya en los principios más básicos de la fisiología y la gravedad. Apoyarse en el estómago ayuda a abrir las vías aéreas de unos pulmones que están comprimidos por el fluido y la inflamación generada por la infección por el Sars CoV-2.
Cuando los pacientes se apoyan sobre su espalda "el corazón se asienta encima de los pulmones y los comprime aún más", explica la especialista Michelle Ng Gong, jefa de Cuidados Intensivos del Albert Einstein College de Nueva York. "Cuando le das la vuelta, se puede empezar a abrir la parte de atrás de los pulmones".
Antes de la pandemia de Covid-19, el pronado se utilizado para algunos pacientes muy enfermos que requerían de respiradores, pero no era algo habitual en las UCIs. Esto se explica porque dar la vuelta a pacientes muy sedados en una maniobra costosa, en la que a veces tenían que participar hasta ocho sanitarios y en la que había que ser muy cuidadoso para no entorpecer el aparataje que rodea al enfermo.
La diferencia con la situación actual es que las UCIs se han llenado de pacientes que respiraban muy mal, pero que no requerían de respirador ni sedación, por lo que era más fácil cambiarlos de posición. También lo están haciendo en planta, con la esperanza de que les ayude a recuperarse antes.
Ya hay evidencia científica de que poner a los pacientes con síndrome de distrés respiratorio agudo que están en esa posición varias horas al día mejora el parámetro más importante para los enfermos de Covid-19: la supervivencia.
Un estudio publicado en The New England Journal of Medicine en 2013 ya convenció a muchos expertos de las ventajas de pronar a los pacientes con respiradores. El trabajo demostró que los enfermos que pasaban 16 horas al día en esa posición, tenía dos veces más posibilidades de sobrevivir que los que estaban colocados sobre su espalda todo el día.
Además, el grupo de pacientes a los que se sometía a esta sencilla y barata maniobra tenían menos paradas cardiorrespiratorias. Sin embargo, antes de la pandemia sólo se ponía en esa posición al 15% de los pacientes intubados.