El nombre de inhibidores de la acetilcolinesterasa puede ser familiar a los neurólogos, ya que a esta familia pertenecen los pocos fármacos aprobados para el alzhéimer que, sin ser curativos, ayudan a retrasar el avance de la enfermedad.
Pero ese nombre es también familiar para agricultores y toxicólogos ya que incluyen algunos agentes nerviosos que llevan años utilizándose con fines bélicos. Según se explica en un artículo publicado en la revista Anales de la Facultad de Medicina en 2015, los inhibidores de la acetilcolinesterasa actúan principalmente bloqueando la degradación de la acetilcolina. Entre estos inhibidores se incluye a los organofosforados, los carbamatos y los agentes nerviosos, utilizados estos últimos con fines bélicos. Se trata del tóxico usado para envenenar al opositor ruso Alexei Navalny.
Los organofosforados (OF) son sustancias clasificadas químicamente como esteres, derivados del ácido fosfórico y ácido fosfónico utilizadas como plaguicidas para el control de insectos; son biodegradables, poco solubles en agua y muy liposolubles, su presentación más frecuente es en forma líquida.