El peligro oculto del cáncer de próstata: el nuevo riesgo del tumor más diagnosticado en hombres
Un estudio realizado entre la población masculina de Suecia revela una dificultad poco tenida en cuenta hasta el momento.
13 junio, 2022 02:43Noticias relacionadas
Este año se diagnosticará de cáncer de próstata en España a 30.884 hombres. Es el tumor más diagnosticado en la población masculina y el cuarto en general tras el colorrectal, el de mama y el de pulmón. La mortalidad ha ido cayendo desde hace más de dos décadas pero un nuevo estudio alerta de que los afectados tienen un 50% más de riesgo de sufrir un trombo grave en los cinco primeros años tras el diagnóstico.
El tromboembolismo venoso no es un desconocido para los pacientes con cáncer. De hecho, es la segunda causa de muerte en esta población tras el propio cáncer. En ello tienen que ver factores personales del paciente, como la edad o la obesidad, pero también algunos relacionados con el tratamiento.
En un estudio previo entre la población sueca, con datos de entre 1997 y 2007, se había concluido que la tasa de eventos tromboembólicos graves en los hombres con cáncer de próstata no era esencialmente diferente a la de la población masculina general.
Sin embargo, los autores (tres trabajan para la farmacéutica alemana Bayer, que comercializa anticoagulantes como el rivaroxabán o la aspirina, y otros dos lo hacen para la Universidad de Uppsala) consideraban que los cambios en la atención al cáncer –mejorando la supervivencia– y el uso de nuevos medicamentos antitrombóticos podían haber modificado esta tendencia.
En el nuevo estudio, publicado en BMJ Open y basado nuevamente en datos de la población sueca, los investigadores observaron a 92.105 hombres con cáncer de próstata entre 2007 y 2017 y los compararon con 466.241 hombres de la misma edad que no sufrían tumores. El 3,2% de aquellos con cáncer de próstata (2.955 hombres) experimentaron un tromboembolismo venoso (un coágulo en una vena profunda) en los siguientes cinco años al diagnóstico, frente al 2,1% de la población masculina general (9.774 hombres).
El mayor riesgo a los 6 meses
Calcularon que, por cada 1.000 hombres con cáncer de próstata, se producían anualmente 6,54 episodios de tromboembolismo, frente a 4,27 en el grupo sin cáncer. Al ajustar por factores socioeconómicos y otros como la presencia o ausencia de enfermedad cardiovascular previa, los investigadores concluían que el riesgo de tromboembolismo era un 50% mayor en aquellos con un tumor diagnosticado, siendo los primeros seis meses el periodo más crítico para sufrirlo.
A pesar de haber ajustado los resultados a variables como las comorbilidades y las medicaciones, los autores apuntan que otras que no se han tenido en cuenta, como el peso, el hábito tabáquico o el consumo de alcohol, pueden haber contribuido a los resultados.
También indican que alguno de los hombres del grupo de comparación pueden haber desarrollado un cáncer durante el periodo de seguimiento, incrementando por tanto el riesgo de tromboembolismo. Pese a ello, indican que la calidad de los datos recogidos es suficientemente buena para extrapolar a la población general.
Desde el Grupo Español de Oncología Genitourinaria creen que los resultados del estudio "no son más que el reflejo de la estrecha asociación entre trombosis y cáncer". Aunque el cáncer de próstata presenta un riesgo relativamente menor que otros cánceres (algunos llegan al 30%), al ser uno de los más frecuentes, la incidencia absoluta de trombosis "tiene que ser muy tenido en cuenta".
Los oncólogos genitourinarios señalan que los resultados de este estudio refuerzan el conocimiento sobre la relación entre cáncer y trombosis, "así como la concienciación de los sanitarios y de los pacientes y personas próximas".
"Como podemos imaginar, la repercusión de la trombosis en el pronóstico y la calidad de vida de las personas con cáncer es muy significativa y, por tanto, es muy importante el diagnóstico y el tratamiento precoz de la misma", afirman.
Nuevas recomendaciones de los cardiólogos
"La prevención cardiovascular en pacientes de cáncer es todavía un reto pendiente", comenta Teresa López Fernández, coordinadora del Cardiooncología de la Sociedad Española de Cardiología. "En los últimos años ha habido un interés creciente en nuestro país, pero todavía no están completamente implantadas las estrategias de prevención, ni a nivel español ni a nivel europeo".
Precisamente, la Sociedad Europea de Cardiología publicará el próximo agosto, coincidiendo con su congreso anual, una guía sobre recomendaciones de prevención y tratamiento en pacientes oncológicos "que va a ayudar a visibilizar la necesidad de implantar estas estrategias".
La cardióloga explica que hay una gama muy diversa de factores que influyen en el riesgo de tromboembolismos en los pacientes de cáncer. "Algunos tumores favorecen per se la trombosis, como los de páncreas u ovario, así como algunos tratamientos", al liberar sustancias que producen inflamación en la pared interna de los vasos sanguíneos.
Sin embargo, "el cáncer de próstata, en principio, no es de los tumores más protrombóticos", si bien esto depende en gran medida del estado en que se encuentre el tumor. En pacientes metastásicos, con cargas tumorales altas, es más frecuente la aparición de este tipo de fenómenos.
Pese a que la prevención cardiovascular todavía es una cuenta pendiente, ya hay tablas para clasificar a los pacientes oncológicos en función del riesgo y no es infrecuente la prescripción de tratamientos profilácticos.