Un hombre se realiza una prueba de aliento.

Un hombre se realiza una prueba de aliento. University of Michigan Health

Salud Gastroenterología

El "monstruo" de SIBO: así es el trastorno digestivo de moda que esconde un negociazo detrás

Los vídeos sobre la enfermedad acumulan cientos de millones de visitas en redes sociales, lo que fomenta el mercado de sus pruebas diagnósticas.

2 agosto, 2023 03:13

En el intestino grueso la densidad microbiana es enorme. La zona está dominada principalmente por bacterias, pero también habitan arqueas, hongos (levaduras) y protozoos. Se calcula que en él hay más de 500 especies. En el intestino delgado, en cambio, la microbiota es escasa. Por eso, si las bacterias logran proliferar en él, se produce un trastorno conocido como sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado (SIBO, por sus siglas en inglés), una enfermedad conocida desde finales de los 90, pero que ha comenzado a copar titulares en los últimos años.

Sólo en la red social TikTok, la etiqueta #SIBO acumula 486 millones de visualizaciones. Numerosos influencers, patrios y extranjeros, no han dudado en colgar en Internet vídeos narrando su experiencia con una enfermedad que cada vez afirma tener más gente. Todo ello contrasta con los estudios científicos que hay a su alrededor. Por ejemplo, en el conocido repositorio científico PubMed, apenas hay 700 trabajos sobre el tema.

"El problema que tenemos con todo lo que está surgiendo en torno al SIBO es que realmente no está muy bien definido", explica Miguel Rodríguez Gandía, médico especialista en Aparato Digestivo y miembro de la Asociación Española del Estudio del Hígado (AEHH). El profesional refiere que cada vez son más las personas que creen sufrir esta enfermedad, cuando los síntomas que presentan pueden ser provocados por cualquier otro problema. Esto enfrenta una realidad, el sobrediagnóstico de SIBO, como denunciaba ya en 2021 un estudio publicado en Digestive Diseases and Sciences.

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Más poético al respecto se mostraba el expresidente del Colegio Estadounidense de Gastroenterología y de la Organización Mundial de Gastroenterología, Eamonn Quigley, en un análisis editorial sobre el auge del SIBO: "Se ha transformado en un monstruo de muchas cabezas que parece engullir todo lo que tiene delante".

Síntomas que se confunden

Según la guía clínica de la revista americana de Gastroenterología, la evidencia sugiere que los síntomas más típicos de esta enfermedad son el dolor abdominal, la hinchazón, los gases, la distensión y la diarrea. En los casos más graves, pueden ocurrir deficiencias nutricionales como déficits de vitamina B12, hierro y vitamina D. Si bien, como concluye el documento, "ningún síntoma único puede atribuirse específicamente a SIBO". "Son fundamentalmente los síntomas del síndrome del intestino irritable (SII) y pueden confundirse unos con otros", apunta Rodríguez Gandía.

El experto, recientemente, denunciaba a través de su cuenta de Twitter el negocio que se ha establecido en torno a esta enfermedad. "El problema es que está de moda y todo lo que es moda llama al negocio", confiesa en conversaciones con este periódico. Sólo basta poner en Google "test SIBO" o "prueba SIBO" para ver toda la cantidad de páginas que se publicitan ofreciendo este tipo de productos. La media ronda los 65 euros, pero hay lugares en los que el kit diagnóstico alcanza los 100 euros.

"Los test de aliento que se hacen tienen una fiabilidad muy mala. Fallan muchísimo, sobre todo con falsos positivos", advierte el digestivo. Sus palabras vienen corroboradas con la investigación de Digestive Diseases and Sciences antes citada"La prueba de aliento con lactulosa (LBT, por sus siglas en inglés) se basa en una premisa incorrecta y, por lo tanto, en interpretaciones incorrectas, lo que ha provocado el sobrediagnóstico de SIBO (...) La LBT debe descartarse para uso futuro", sentencia el escrito.

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La lactulosa es un azúcar sintético que no se absorbe en el intestino delgado. Debe de llegar al colon, donde es fermentada por las bacterias que viven en este tramo del tubo digestivo en un proceso que genera hidrógeno y/o metano. Lo que hace este test es ir midiendo los niveles de gases cada 25-30 minutos y la teoría es que, si la persona no tiene SIBO, se verá una producción de gases a partir del minuto cien.

Existe en casos concretos

"El principal motivo de falso positivo de sobrecrecimiento bacteriano es tener un tránsito acelerado y muchos pacientes con intestino irritable tienen predominio de diarrea", aclara el experto. Según él, estas pruebas sólo aciertan en un 40% de las personas sin patologías como ésta, un porcentaje muy bajo para un test diagnóstico. "Imagínate una prueba para una enfermedad grave como el cáncer que falla al 50%. No debería hacerse, ¿no?", reflexiona.

Si bien, el profesional no quiere que quede en el aire la especulación de que el SIBO no existe. Según la Clínica Mayo, el crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado puede ser causa de complicaciones de la cirugía abdominal, como un baipás gástrico o una gastrectomía; problemas estructurales dentro y alrededor del intestino delgado y ciertas patologías, como la enfermedad de Crohn, la enteritis por radiación, la esclerodermia, la enfermedad celíaca, la diabetes u otras afecciones que pueden retardar el movimiento (motilidad) de los alimentos. "Sí existe, pero bajo unas condiciones muy específicas. Todavía nos queda mucho por hacer", remacha.