El diestro Jesulín de Ubrique ha sufrido un microinfarto mientras se encontraba descansando con su familia en El Rincón de la Victoria y ha sido ingresado de Urgencia en un hospital de Málaga. Según informa la familia y confirma Jaleos, el torero se encuentra fuera de peligro y en observación. El torero de 50 años fue rápidamente atendido este domingo después de encontrarse mal en casa y cuenta con un antecedente de accidente cardiovascular, una arritmia, que le fue diagnosticada en 2017

Se ha tratado de un "susto", asegura la familia, y así se suelen interpretar estos 'microinfartos', que habitualmente responden a lo que clínicamente se conoce como accidente isquémico transitorio. Según explica la Clínica Mayo, este accidente viene causado por una breve obstrucción del flujo sanguíneo al cerebro, que dura unos pocos minutos y, afortunadamente, no suele causar un daño a largo plazo. Sin embargo, es un aviso de un problema sistémico, y uno de cada tres personas que lo sufren acabará padeciendo a largo plazo un ictus o infarto cerebral.

Estos microinfartos se denominan también se denominan "silentes" porque el paciente puede no ser consciente de estarlo sufriendo, aunque las personas a su alrededor pueden darse cuenta de que sufre desorientación o se traba al hablar. En otros casos, sí llevan aparejados síntomas más serios de mareo, pérdida de visión o parálisis de los miembros, que son los que ha podido sufrir Jesulín. Sin embargo, un trabajo de la Fundación Pasqual Maragall aclaraba que una persona afectada por microinfartos puede sufrir miles de ellos a lo largo de su vida sin ser consciente de ellos, por lo que el diestro ya podría estar afectado desde antes.

"Los microinfartos cerebrales son minúsculas lesiones vasculares de tamaño variable (alrededor de 0,05 a 3 milímetros de diámetro) y silentes (es decir, que van apareciendo sin dar síntomas), que por lo general son de origen isquémico. Es decir: el flujo sanguíneo se reduce o se detiene dando lugar a una lesión en ese territorio cerebral por falta de oxígeno", explican desde la Fundación. "Estas lesiones se localizan en territorios cerebrales irrigados por arterias y arteriolas de pequeño calibre, las cuales suelen ser áreas limítrofes irrigadas por las grandes arterias cerebrales".

Es importante subrayar que los factores de riesgo detrás del microinfarto o accidente isquémico transitorio son los mismos que los del infarto cerebral, y principalmente responden a hábitos de vida. Principalmente, el tabaquismo, el alcohol, el sobrepeso, el sedentarismo, los elevados niveles de colesterol o la elevada presión arterial. Además, es más frecuente en los hombres y a partir de los 50-55 años como en el caso de Jesulín. La ateroesclerosis -la formación de placas de colesterol que obstruyen las arterias- es una causa habitual de isquemia.

"Las placas pueden disminuir el flujo sanguíneo en una arteria o llevar a la formación de un coágulo. Un coágulo de sangre que se desplaza desde otra parte del cuerpo, como al corazón, a una arteria que irriga el cerebro también puede causar un accidente isquémico transitorio", aclaran desde la Clínica Mayo. "En un accidente isquémico transitorio, a diferencia de un accidente cerebrovascular, la obstrucción es breve y no hay daño permanente".

Finalmente, la arritmia sufrida por el diestro puede haber sido un antecedente a tener en cuenta. Hay dos tipos de arritmias: las taquicardias se producen cuando la frecuencia es superior a los 100 latidos por minuto, mientras que las bradicardias lo hacen por debajo de los 60 latidos. Aunque es una alteración fácilmente controlable, aumenta el riesgo de formación de un coágulo, que provocará a continuación un infarto de gravedad variable. Tras este "susto", definitivamente, Jesulín tendrá que someterse a un seguimiento a largo plazo de su salud cardiovascular.