Aguantar sin ir al baño puede suponer problemas a largo plazo.

Aguantar sin ir al baño puede suponer problemas a largo plazo.

Salud

Este es el tiempo máximo que es saludable aguantarse la orina: el aviso de los urólogos

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Orinar es una necesidad fisiológica fundamental para eliminar desechos del cuerpo, pero también poseemos la capacidad de retener la orina. Esta función es crucial, ya que en muchas ocasiones nos vemos obligados a hacerlo, a veces durante períodos prolongados. Esto nos lleva a preguntarnos cuánto tiempo es realmente seguro aguantar sin ir al baño antes de que se convierta en un problema de salud.

Tres urólogos consultados por el medio estadounidense Parade ofrecen respuestas esclarecedoras a esta cuestión. "No se puede subestimar la importancia de vaciar la vejiga con regularidad", afirma el Dr. Daniel Phillips, urólogo del Memorial Hermann, y recomienda a los pacientes, especialmente a aquellos con síntomas urinarios, vaciar la vejiga cada dos o tres horas.

En términos similares se pronuncia la Dra. Debra L. Fromer, del Centro Médico de la Universidad de Hackensack, coincide en que la mayoría de los adultos sanos pueden retener la orina durante dos a cuatro horas, pero subraya la importancia de escuchar al cuerpo y orinar cuando se sienta la necesidad.

El Dr. Bilal Chughtai, del Hospital Plainview, sugiere un margen de tres a cuatro horas como seguro para la mayoría de las personas. Sin embargo, advierte que algunas profesiones, como maestros y camioneros, pueden verse obligadas a aguantar más tiempo debido a la naturaleza de su trabajo. Esta situación, aunque no es ideal, no debería causar problemas graves si no es algo que se ocurra con mucha frecuencia.

Hay que tener en cuenta que estos plazos son diurnos. Cuando dormimos, como todos podemos comprobar, necesitamos ir menos al baño. Durante la noche, producimos menos orina, lo que aumenta el tiempo de aguante, que puede oscila entre las sies y las ocho horas.

Qué elementos influyen

La capacidad de la vejiga en adultos varía entre 280 y 350 ml, aunque puede haber diferencias significativas entre individuos debido a factores anatómicos, estado de salud y hábitos urinarios. Algunas personas pueden tener una capacidad mayor o menor, lo que afecta su tiempo de retención. Beber mucho líquido aumenta la frecuencia de la necesidad de orinar, ya que el cuerpo procesa el exceso de líquidos y los expulsa a través de la orina.

Mantener una buena hidratación es esencial para la salud, pero implica más visitas al baño. Sustancias como la cafeína y el alcohol actúan como diuréticos, lo que significa que aceleran el llenado de la vejiga al aumentar la producción de orina por los riñones, haciendo que necesites orinar con más frecuencia.

Afecciones como la diabetes, problemas neurológicos y de próstata pueden incrementar la frecuencia urinaria. Estas condiciones pueden afectar tanto la capacidad de la vejiga como la función del sistema urinario, haciendo que la necesidad de orinar sea más frecuente.

La edad también es un factor importante. Cuando envejecemos, los músculos de la vejiga tienden a debilitarse. De esta forma, sufrimos una reducción en la capacidad de retención. 

Además, los cambios hormonales y otros factores relacionados con la edad pueden influir en la frecuencia urinaria, haciendo que las personas mayores necesiten orinar más a menudo. El estrés y la ansiedad también pueden aumentar la urgencia de orinar.

Y los riesgos que supone

Aunque, como hemos visto, aguantar las ganas de ir al baño un par de horas no tiene por qué generar problemas graves. Pero no hay que perder de vista que hacerlo en exceso o en repetidas ocasiones sí puede tener consecuencias. "Existe un riesgo asociado con retener la orina durante demasiado tiempo y tener la vejiga llena por periodos prolongados", afirma el DR. Phillips

Infecciones del tracto urinario (ITU). Casi la mitad de las mujeres sufrirá una infección urinaria en algún momento de su vida, y los hombres también pueden sufrirla. Aguantarse la orina durante demasiado tiempo aumenta el riesgo de sufrir una infección urinaria. "Cuando la orina permanece en la vejiga durante demasiado tiempo, las bacterias tienen más tiempo para multiplicarse, lo que aumenta el riesgo de infecciones urinarias", afirma la Dra. Fromer.

Fugas a corto plazo. Si retenemos la orina durante demasiado tiempo, llegará un punto en que comenzará a salir. "Cuanto más tiempo esté llena la vejiga, mayor será la probabilidad de que se produzcan pérdidas de orina", explica la Dra. Fromer. Evidentemente, esto puede generar situaciones embarazosas que no son agradables.

Debilitamiento de la vejiga. Retener la orina durante más de un par de horas puede dañar la vejiga. "El llenado excesivo puede estirar los músculos de la vejiga y debilitarlos con el tiempo, lo que posiblemente afecte el vaciado de la vejiga", señala el Dr. Chughtai. La Dra. Fromer coincide y agrega que, irónicamente, retener la orina durante demasiado tiempo puede generar la necesidad de orinar con mayor frecuencia a largo plazo.

Daño renal. Retener la orina durante demasiado tiempo y con demasiada frecuencia también puede dañar los riñones. "En los casos más graves, la práctica de retener la orina puede aumentar la presión en la vejiga hasta el punto de que los riñones pueden hincharse y dañarse", advierte el Dr. Phillips.