Lanzada en 1999, Napster fue la primera gran red P2P de intercambio de música y la primera gran empresa de distribución de archivos musicales en internet. Su inicial andadura, breve pero popular, terminó en los juzgados de EEUU en 2001 cuando la Justicia estadounidense determinó que estaban infringiendo las leyes de copyright y tuvieron que cesar sus operaciones. Durante esos dos años de funcionamiento, el servicio llegó a alcanzar los 80 millones de usuarios y revolucionó la concepción del consumo de música en la Red.
Tras su gran derrota judicial, en 2002 Napster fue relanzado como un servicio legal de música en el que los usuarios podían consumir canciones previo pago. Adquirido por distintas empresas a lo largo de los años y con varios relanzamientos de por medio, Napster ha seguido ofreciendo ese servicio durante los últimos 15 años, relegada, eso sí, a un segundo plano por apuestas más potentes como Spotify.
Sin embargo, la pionera de las descargas musicales podría estar resurgiendo, lista para plantarle cara a los actuales gigantes del sector.
La empresa Rhapsody International, actual propietaria de Napster, ha registrado unos beneficios de 1.6 millones de dólares (1.47 millones de euros) en el tercer trimestre de este año, meses después de llevar a cabo una ronda de despidos, cuya cifra total no se ha hecho pública, para racionalizar sus operaciones.
"Como parte de nuestro plan para conseguir que Rhapsody/Napster se encuentre en una posición mejor para ser rentable a largo plazo y para lograr un crecimiento acelerado en un mercado global competitivo, tenemos una nueva estructura, más simplificada, que, desafortunadamente, tiene un impacto en cierto número de puestos de trabajo en nuestras oficinas de todo el mundo", afirmó Mike Davis, CEO de Rhapsody, cuando se anunciaron las destituciones.
A pesar de la reestructuración, estos números positivos han sorprendido a los analistas cuando han aparecido reseñados en un documento presentado por RealNetworks, propietaria de un 42 % de Rhapsody, ante la Comisión de Mercados de Valores estadounidense. Se trata de las primeras ganancias significativas obtenidas por la firma en más de seis años.
Estos resultados podrían indicar que Napster está logrando hacerse con parte del pastel del streaming musical, entrando en competencia directa con otros servicios del sector que tratan también de hacerse un hueco como Tidal o el recién llegado Amazon Music. Sin embargo, según sus últimos datos conocidos, el total de usuarios de la plataforma sigue muy lejos de las cifras de los principales servicios. En junio de este año, Napster contaba con 3.5 millones de suscriptores frente a los 17 de Apple Music o los 40 de Spotify.
En esta batalla por captar la atención —y el dinero— de los usuarios, Tidal, la compañía sueca comprada y relanzada por Jay Z, ha optado por promocionarse como una empresa dirigida por artistas en la que los intérpretes reciben mayores beneficios. Por su parte, Amazon Music, el recién llegado, cuenta con que Echo, su altavoz inteligente que responde a comandos de voz, sirva para distinguirlo del resto. Mientras, Apple Music estaría planteándose bajar los precios para atraer a usuarios de Spotify, el rey del sector que, salpicado por polémicas de cuando en cuando, lucha por rentabilizar su servicio.
Napster, con sus pequeños brotes verdes, cuenta con el reconocimiento de su marca, pionera de la música en internet, para renacer de las cenizas de la piratería como una plataforma legal y nuevamente exitosa.