El café es probablemente una de las bebidas más conocidas y consumidas del mundo, no sólo tiene una dimensión gastronómica sino una dimensión social, es protagonista de muchos de los momentos de nuestro día a día, quién no ha oído o dicho alguna vez eso de ¿nos tomamos un café?
El café se obtiene a partir de las semillas tostadas y molidas de los frutos de la planta del café o cafeto, el proceso de plantación, recolección y procesado posterior es largo y tedioso, llevando a los jornaleros a tener duras y largas jornadas de trabajo.
Para la elaboración del café se usa sólo el fruto y se desecha toda la pulpa que lo rodea. Esta pulpa desechada se vierte en ríos o se deja descomponer en montones, es a partir de este hecho como surgió el propósito de hacer algo mejor con ella, surgiendo el producto que queremos presentaros en este artículo, la harina de café.
Los creadores de este nuevo producto, la compañía CF Global, asegura que la harina de café se convertirá en un nuevo ingrediente nutritivo y sabroso, afirmando además que va a servir para crear nuevos puestos de trabajo sostenibles en algunas de las áreas más pobres del mundo, cuidando también del medio ambiente por el hecho de eliminar los residuos botánicos resultantes de la recolección del café. Ellos también afirman haber estructurado su modelo de negocio de forma que aporte beneficios económicos y ambientales positivos para todos, siendo este nuevo producto una nueva fuente de beneficios para la industria cafetera tanto si las cosechas son buenas como si se ven mermadas por distintos motivos.
A pesar de que el lanzamiento comercial de la harina de café está programado para el 2015, fue presentado en el ámbito culinario en 2012, donde muchos chefs descubrieron el potencial que podría tener a nivel mundial por su sabor y la versatilidad de su formato.
Diversos chefs ya colaboran con la compañía realizando “experimentos” para conseguir potenciar su sabor, el sabor de café en la harina es casi imperceptible, por el contrario posee un sabor ahumado, tostado y afrutado, recordando a la ciruela asada y a los cítricos. La harina de café se puede incorporar en la elaboración de cualquier plato, por ello los chefs están creando recetas adaptadas al nuevo ingrediente. Ellos han descubierto que su sabor funciona de una mejor forma mezclándose con otras harinas (usando entre un 18 y 25% de harina de café en el total de la harina pedida por la receta), por lo que se han elaborado ya gnocchis, tortas de café, galletas, bollos, panes, etc., logrando el éxito para el paladar.
Con respecto a sus beneficios nutricionales se puede destacar que la harina de café:
- Tiene 5 veces más fibra que la harina de trigo.
- Tiene 84% menos grasa y 42% más fibra que la harina de coco.
- Tiene 3% más de proteína que la col rizada fresca.
- Tiene 3% más de hierro que las espinacas frescas y más hierro que cualquier grano o cereal.
- Contiene menos cafeína que el café.
- Aproximadamente 28 gramos de harina de café tiene 2 veces más potasio que un plátano.
- Libre de gluten.
La harina de café ya se está produciendo en tres continentes, aportando beneficios a países como Hawaii, Nicaragua, Guatemala, México y Vietnam, aunque el objetivo es que el impacto sea mundial.
Y a ti, ¿qué te parece este nuevo producto? ¿Estarías dispuesto a probarlo?
Fuente | Coffee Flour