Grimbergen Belgian Pale Ale, tradición belga y creatividad artesanal
Grimbergen Belgian Pale Ale, una cerveza que combina los sabores tradicionales con las nuevas tendencias, y que podrá disfrutarse en la experiencia pop up Grimbergen Place.
8 abril, 2019 09:27Grimbergen, la cerveza belga de abadía con más de ocho siglos de historia, presenta una nueva incorporación a su familia: Grimbergen Belgian Pale Ale. Una apuesta por el sabor de la tradición combinado con novedosas tendencias que llega como un soplo de aire fresco entre los amantes del lúpulo, ansiosos por descubrir sabores y texturas originales.
Compleja pero refrescante, hablamos de una cerveza en la que los aromas y la ligera amargura de sus lúpulos contribuyen a realzar las notas naturales de la levadura única de Grimbergen. Es una Pale Ale belga moderna, con sabores de frutas maduras y frescas. Dorada, brillante y con reflejos amarillos, combina a la perfección tres lúpulos: citra, centennial y simcoe.
Gracias a esta combinación, la cata de Grimbergen Belgian Pale Ale resulta más que atractiva al tener un aroma a cítricos tropicales con ciertas notas especiadas y florales que se complementan con los sabores dulces y afrutados de sus lúpulos. El resultado conlleva un cierto sabor amargo que la hace más interesante al paladar, y que realza las notas naturales de la levadura única de esta marca con más de ocho siglos de historia.
Los rollitos vegetales o las crudités con salsas son buenas opciones para acompañar una comida entre amigos con esta Belgian Pale Ale. Lo mismo que un tartar de atún o salmón, así como ceviches y escabeches de acidez moderada. Las carnes orientales completan este elenco gastronómico que subirá un escalón al ser maridado con el nuevo líquido.
Con Grimbergen Belgian Pale Ale se ha conseguido llegar al equilibrio perfecto entre la tradición belga y la creatividad artesanal, sin perder la esencia de sus hermanas mayores Blonde, Double y Blanche, que han sido galardonadas con tres premios en la última edición de los World Beer Awards 2018, uno de los concursos más importantes a nivel internacional que premia a las mejores cervezas de todo el mundo.
La historia de Grimbergen se remontan al siglo XII, cuando los monjes de la abadía que lleva su nombre empezaron a elaborar sus propias cervezas de manera artesanal en el año 1128. La abadía fue destruida en tres ocasiones, y las mismas veces fue de nuevo levantada por ellos. "Ardec nec consumitur", quemado, pero nunca destruido, es su lema, de ahí el Fénix que aparece en sus etiquetas como símbolo del “renacimiento”. A día de hoy, cada cerveza sigue siendo probada por los monjes de la abadía y parte de los beneficios de sus ventas se destina a obras sociales.
Grimbergen Place: un premio para los sentidos
Creada pensando en evocar un auténtico momento de placer y desconexión, el lanzamiento de la nueva Belgian Pale Ale viene acompañado de la apertura de una experiencia pop up que visitará en los próximos meses las ciudades de Madrid, Barcelona y Oviedo, donde los visitantes podrán conocer y saborear de primera mano el nuevo líquido mientras disfrutan de un auténtico momento de recompensa sensorial.
Así, Grimbergen Place llega a Madrid del 25 al 28 de abril, presentando un espacio en el que vivir una auténtica experiencia cervecera con todos los sentidos. En definitiva, un lugar fascinante y delimitado por aristas de luz donde el tiempo se posterga hasta perderse por completo... Un espacio donde disfrutar de un verdadero momento de recompensa. Instalado en la calle San Vicente Ferrer 33 y abierto público de forma gratuita en dos bloques de 12:00h a 15:00h y de 17:00h a 22:00h, para ofrecer un viaje sensorial en un espacio diseñado para estimular cada uno de tus sentidos.
Sobre Mahou San Miguel
Compañía familiar 100% española, líder del sector cervecero en nuestro país con una cuota de producción del 34%. Dispone de ocho centros de elaboración de cerveza –siete en España y uno en India–, cuatro manantiales de agua con sus plantas de envasado y un equipo de más 3.200 profesionales. Cuenta con más de 125 años de historia, que comienzan con el nacimiento de Mahou en 1890. Desde entonces, la empresa no ha parado de crecer. En el año 2000, Mahou adquiere San Miguel. En 2004, incorpora la marca canaria Reina y, en 2007, Cervezas Alhambra. Además, ha diversificado su negocio con la compra en 2011 de Solán de Cabras.
Posee un amplio portafolio de cervezas nacionales donde destacan, entre otras, Mahou Cinco Estrellas, San Miguel Especial y Alhambra Reserva 1925; productos pioneros en su categoría, como San Miguel 0,0%, San Miguel ECO, Mahou Barrica y San Miguel 0,0 Isotónica, y marcas aptas para celiacos como San Miguel Gluten Free y Mahou Cinco Estrellas Sin Gluten. También tiene una amplia gama de cervezas internacionales, fruto de acuerdos con partners como Carlsberg y Warsteiner, y marcas de agua como Solán de Cabras. La internacionalización es uno de los ejes estratégicos para el desarrollo de su negocio. Produce más del 70% de la cerveza española que se consume en el mundo y está presente en más de 70 países.