Eva Longoria acostumbra a visitar España a menudo, especialmente Marbella, a donde se mudará próximamente tras comprar una mansión de más de 500 metros cuadrados. En esta ciudad de la Costa del Sol se encuentra su restaurante favorito, en el cual celebró la Nochevieja de 2022 y que está considerado el mejor decorado de Europa según los Restaurant & Bar Design Awards.
Este lunes la actriz se ha dejado ver por Madrid, donde ha comido junto a Dabiz Muñoz y Borja Beneyto, vocal de la Junta Directiva de la Real Academia de Gastronomía. El chef ha dado a conocer el encuentro a través de una fotografía publicada en su Instagram. En ella se les puede ver a los tres alrededor de una mesa de mantel blanco con varios platos de comida y algunas copas de vino a medio beber.
El lugar escogido para la velada ha sido el mítico restaurante Lhardy, uno de los más icónicos de la capital, hasta el punto de que su eslogan más reciente reza así: "No se puede concebir Madrid sin Lhardy". El establecimiento, situado en el número 8 de Carretera de San Jerónimo, al lado de la Puerta del Sol, fue fundado en 1839 y por sus mesas han pasado personajes tan célebres como la Reina Isabel II de España y su hijo Alfonso.
Qué se come en el histórico restaurante Lhardy
"No hay un plan mejor, comer cocido madrileño con amigos y hablando de pádel", ha escrito Dabiz Muñoz bajo la imagen que ha compartido junto a Longoria y Beneyto. Y es que Lhardy es especialmente famoso por su cocido, que cuesta 65€ (es el más caro de Madrid) y está compuesto por una sopa de fideos de cabello de ángel, garbanzos perdosillanos, chorizo de León, morcilla de cebolla de Baeza, longaniza trufada de cerdos de Euskal Txerri y verduras de Carabaña.
Asimismo, destacan su consomé (que elaboran a partir del caldo del cocido con una chispa de vino de Jerez), las croquetas (también del cocido), el solomillo Wellington (que trinchan en sala y sirven acompañado de patatas a la inglesa), el cóctel de gambas, la ensaladilla de quisquilla, el salpicón de bogavante gallego, los callos o el pato canetón de Las Landas a la naranja.
En cuanto a los postres, se recomienda pedir su famoso suflé, el cual flambean en directo frente a los comensales. Este plato lleva helado, merengue y un chorrito de ron y está inspirado en la Omelette Norvégienne francesa. También sobresalen el carro de quesos seleccionados, los helados caseros y la macedonia de frutas con zumo de naranja.