En la pequeña localidad sevillana de Estepa un obrador especializado en la elaboración de helados artesanales ha querido salirse del guion e innovar sirviéndose de uno de los productos más emblemáticos de la región: la aceituna. Una apuesta por su patrimonio gastronómico que ha nacido de la visión innovadora de Sebastián Barrena, gerente de la heladería Obrador Helados Estepa, quien junto a su equipo ha logrado crear helados artesanales con la aceituna manzanilla, gordal o prieta como ingrediente estrella.
Un desafío convertido en helado
Todo comenzó con una conversación entre Barrena y la periodista Carmen González, originaria de Arahal, una localidad sevillana famosa por ser líder mundial en la producción de aceitunas de mesa. González, apasionada defensora de las aceitunas de su tierra, lanzó un reto a Barrena: crear un helado que incorporara este producto tan típico de la gastronomía andaluza. Para el equipo de Obrador Helados Estepa, siempre en busca de nuevos desafíos, esta propuesta ha sido el detonante perfecto para poner en marcha su creatividad.
"Nos gustan mucho los desafíos y hacer cosas diferentes", ha explicado Barrena a EFE, a la vez que describe el proceso artesanal que siguen en su obrador para dar vida a sus creaciones. Así nacieron los helados de aceitunas, que sorprenden a todos aquellos que se atreven a probarlos. "Para nosotros, el helado es una pasión y llevarlo a otros niveles es nuestro objetivo", ha afirmado.
La alquimia del helado de aceituna
Lejos de ser un simple experimento, la elaboración del helado de aceitunas sigue un proceso meticuloso y artesanal. Una de las claves del éxito de esta creación es la elección de las variedades de aceituna utilizadas -manzanilla, gordal y prieta- que aporta, cada una de ellas, un matiz único y diferente a los helados.
El proceso de elaboración es relativamente simple pero requiere de precisión. El equipo selecciona las aceitunas, las mezcla con agua y un ingrediente neutro, y después las procesa cuidadosamente para lograr una textura cremosa y suave, sin necesidad de incorporar lácteos. Esto convierte al helado de aceituna en una opción apta para intolerantes a la lactosa, ampliando aún más su atractivo entre los consumidores.
Uno de los sabores más llamativos es el de aceituna prieta. A primera vista, su aspecto oscuro podría confundirse con chocolate, pero el sabor en boca es una explosión de matices salados y dulces, resultado del proceso natural de maduración de este tipo de aceituna. Según Barrena, la prieta "es aceite puro" que, tras ser secada y aliñada con ingredientes como pimiento rojo, ajo, comino y orégano, adquiere un sabor único que ahora puede disfrutarse en forma de helado.
Innovación sin límites
Este innovador proyecto no es con el primero que el obrador se lanza a la piscina. El equipo de jóvenes artesanos que lo compone ha demostrado en numerosas ocasiones que la imaginación es su mejor aliada. Desde helados de wasabi hasta sorbetes de ginebra con base de aceite de oliva, como la exclusiva 'Ginoro' elaborada en Arahal por la firma Enoro, el obrador no conoce límites cuando se trata de sorprender a sus clientes.
El reciente lanzamiento oficial de los helados de aceituna tuvo lugar en el marco de la VII Jornada de la Aceituna de Mesa en Arahal, donde expertos del sector pudieron degustar estos sorprendentes sabores sin quedar indiferentes.
Lo que comenzó como un desafío personal entre un heladero y una periodista, ha terminado por situar a Obrador Helados Estepa en el mapa gastronómico de la innovación heladera como reflejo de cómo la tradición y la modernidad pueden fusionarse para crear algo completamente nuevo, rico y nutritivo.