Construir cosas con nuestras propias manos es una bonita manera de desconectar. Pero también lo es de conectar con nosotros mismos. En estos tiempos en los que todo es una lucha por captar nuestra atención para vendernos algo, hacer cosas con las manos, que nos obliguen a estar 100 % presentes en la tarea que estamos realizando es el antídoto perfecto contra las mentes dispersas.
Si, además, podemos compartir nuestros pequeños proyectos de construcción con personas queridas, estaremos creando recuerdos bonitos que agradeceremos más adelante.
Y si con estas actividades también contribuimos a cuidar un poco del mundo reciclando y reutilizando materiales ya si es verdad que no hay excusa para no ponerse manos a la obra.
[9 ideas para reutilizar las cajas de fresas y pasar un rato entretenido]
A la puerta de cualquier frutería podemos encontrar pilas de cajas vacías, muchas veces rotas para que ocupen menos espacio, pero, por lo general, ningún frutero tiene problema en guardarte enteras las que necesites si se lo pides. Desde las pequeñas cajas de fresas, que sirven para hacer pequeños proyectos de ordenación en casa hasta las más grandes y resistentes con las que se pueden construir pequeños muebles que le darán un toque muy personal a la decoración de nuestro hogar.
En internet se pueden encontrar mil ideas y tutoriales, pero si no sabes por dónde empezar, te dejamos un poco de inspiración para que puedas valorar el potencial de las cajas de fruta como material a reutilizar en casa.
Una estantería rústica para libros
Las cajas de fruta tienen el tamaño perfecto para hacer estanterías como esta en la que tener ordenados los libros de bolsillo.
A la hora de personalizarla, se puede optar por una mano de pintura o por algún revestimiento hecho con la técnica de decoupage, como en la de la foto.
Una mesa rinconera
Cualquier rincón es bueno para tener un pequeño espacio de almacenamiento, como este hueco entre la pared y el sofá del salón.
Un espacio para tener recogidos los mandos a distancia, los libros que estamos leyendo, algún juego de mesa o lo que se nos antoje.
Un organizador para el baño
Un pequeño mueble donde guardar rollos de papel, toallas y pequeño utillaje del baño para que esté todo bien ordenado.
Un vestidor para muñecas
Convertir el orden en parte del juego puede ser una buena manera de que los más pequeños no lo consideren un rollo.
Si, además, le ponemos un cierre al armario, será fácil de transportar y estará listo para jugar con él en cualquier sitio.
Dispensador de cintas
Una manualidad para amantes de las manualidades o de la costura. Así se pueden tener a mano todos los lazos y cintas ordenados y listos para utilizar.
Orden en la cocina
Un concepto parecido al anterior, pero, en este caso, pensando en tener la encimera bien ordenada.
La idea, como se puede apreciar en la imagen, también es perfecta para dar una nueva vida a un viejo cajón de un mueble.
Una isla de cocina
Una coqueta isla para tener espacio de encimera y almacenamiento extra en la cocina o en la terraza. Un proyecto que es perfecto para realizar en las vacaciones de verano.
Un aparcamiento molón para coches
Volvemos a mezclar juego con el orden en casa. A muchos peques les encantan los coches y una buena forma de que no estén desperdigados por toda la casa es construirles un garaje como éste. Se divertirán aparcando los coches y disfrutarán aún más ayudando a personalizarlo.
Un dispensador de toallas
Un trozo de cuerda y un poco de pintura es todo lo que se necesita para tener las toallas del baño ordenadas y siempre a mano.