Un filete empanado.

Un filete empanado. iStock

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Ni perejil ni pimentón: el ingrediente que debes poner en el pan rallado para dar más sabor a tus filetes empanados

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El filete empanado o escalope, ya sea elaborado con cerdo, pollo o ternera, es un plato muy habitual de la época veraniega, cuando es habitual que acompañe a las comidas en exteriores, ya sea en salidas de pícnic, en salidas a la playa o la piscina, etcétera.

Elaborar la carne de esta forma, con antelación, ayuda a comerla sin que quede seca, pero para ello conviene poner en práctica un sencillo truco para que el pan rallado al hacer filetes empanados quede mucho más sabroso, solo en un minuto.

Lo más importante para conseguir un filete empanado perfecto, lo más importante es contar con una buena materia prima, pero si se va a preparar un escalope de ternera, también es necesario aplastar el filete para aplanar la carne y conseguir que se rompan sus fibras, para que así quede más tierna, un paso que no resulta tan necesario en el caso de que se vaya a preparar con pollo, aunque tampoco estaría de más hacerlo.

En todo caso, como hemos mencionado, existe un pequeño truco que puedes aplicar para dar un mayor sabor a los rebozados, y esto pasa por añadir las especias correctas al pan rallado.

Las mejores especias para empanar

En los supermercados es fácil poder encontrar el pan rallado acompañado de perejil y ajo, pero es más económico y una opción preferible, especiar el pan rallado por uno mismo. Aunque la sal y la pimienta es mejor echarla directamente sobre los filetes, hay una mejor opción para conseguir un mejor resultado final, que es usar el ajo en polvo.

Esta es una especia que habitualmente está en la cocina y que no es más que ajo deshidratado en polvo, que aporta una gran cantidad de sabor tanto a los filetes empanados, pero también se puede usar para echar en aliños de ensalada o en otros platos como pollo al horno o freidora de aire.

No hay que confundir en ningún caso el ajo en polvo con la sal de ajo, que en ese caso es una mezcla de ajo seco molido y sal de mesa. Aunque se puede usar esta última, habrá que tener cuidado de no haber echado demasiada sal en los filetes. Por tanto, sería una mejor opción usar ajo en polvo, pues permite controlar en mayor medida el punto de sal de las recetas.

Por otro lado, otra especia que es perfecta para añadir al pan rallado en todo tipo de rebozados es la cebolla en polvo, que se puede combinar con el ajo para dar un mayor sabor a los escalopes, o bien recurrir a otras especias como albahaca, orégano, comino, curry, tomillo o pimentón.

Trucos para los mejores filetes empanados

Existen muchos géneros los que admiten el empanado, desde croquetas a mariscos, verduras, albóndigas, etcétera, pero en este caso seguiremos centrados en los filetes empanados, donde debes conocer una serie de consejos y trucos que te permitirán convertirlos en un bocado gourmet.

Para empezar, conviene decantarse por empanar con alguno de los tres grandes clásicos, que son:

  • Empanado a la inglesa: el filete, después de ser enharinado y, antes de pasar por el pan rallado, se reboza en salsa inglesa, cuya base es el huevo batido, al que se le añade aceite de oliva o girasol y, en ocasiones, un poco de leche, agua o cerveza, además de especias como mostaza o pimienta, y un poco de sal.
  • Empanado a la francesa: el empanado solo requiere de mantequilla y pan rallado, en un empanado que consiste en hacer una mantequilla clarificada, es decir, fundirla y dejar que repose para desechar los posos y quedarse con la grasa. Se unta el filete con esta mantequilla y luego se pasa por el pan rallado.
  • Empanado a la milanesa: en este tipo de empanado, el filete se pasa primero por harina, luego por huevo y finalmente por una mezcla de pan rallado y queso parmesano. La proporción recomendada de queso parmesano y pan rallado es de un tercio de queso sobre el volumen del pan.

Por otro lado, puede ser recomendable sustituir el pan rallado por otros elementos, pudiendo prescindir del pan por usar otros elementos como copos de maíz, nacho, patatas fritas, copos de patata, semillas, frutos secos o kikos. Aunque es una forma diferente de disfrutar del empanado, es una forma diferente de dar juego a la elaboración de este plato y de conseguir unos matices interesantes de sabor.

Otra buena opción es variar los tipos de harina utilizados, ya que, si bien es habitual que se piensa en la harina refinada de trigo, a la hora de preparar filetes empanados se puede buscar diferentes sabores a través de la harina del empanado, haciendo que incluso se pueda convertir el filete empanado en un bocado apto para celíacos. Por ejemplo, se puede optar por harina de garbanzo, que aportaría un sabor y textura excepcional, pero también hay otras harinas como la de centeno, espelta, arroz o cualquier otra, que pueden dar un toque diferente.

El sabor de los filetes empanados también puede proceder del interior, con las carnes y pescados utilizados, por lo que conviene marinarlos durante un tiempo antes de empanarlas, lo que aportará una textura más tierna y jugosa. Para ello es suficiente con sumergirlos en leche, en salsa de soja, en una mezcla de limón, mostaza y miel, o en una mezcla de hierbas o especias.