
Una tortilla de patatas casera en un plato.
Ni aceite ni microondas: el sencillo método de las abuelas para 'salvar' una tortilla de patatas que se ha quedado seca
Se trata de una fórmula tradicional que se ha ido perdiendo con el tiempo.
Más información: El ingrediente secreto de Martín Berasategui para que la tortilla de patata quede superbuena: no es cebolla.
La tortilla de patatas es la tapa que más se pide en España. Así lo corroboraba el estudio Importancia social de la tapa (2024) realizado por Saborea España y Hostelería de España con motivo del Día Mundial de la Tapa, que se celebra cada 16 de junio. También lo demuestra una investigación llevada a cabo por el obrador gourmet Barranco's Food, quien, por otra parte, asegura que de todas las variedades de tortilla de patata que existen, la de cebolla es la más demandada.
Una información que resulta bastante coherente, ya que se trata de una receta sabrosa difícil de igualar: es buena, es barata y, por qué no decirlo, también es bonita. ¿A quién no le conmueve ver una tortillita melosa deshaciéndose en el plato?
Este plato es una de nuestras mejores banderas culinarias y un gran reclamo para el turismo gastronómico. Además, es una receta que mucha gente en nuestro país consume casi todas las semanas. No obstante, esa 'sobreingesta' provoca que muchas veces cocinemos más tortillas de la que podemos comernos y que se pierda comida que podría aprovecharse.
El truco para 'salvar' una tortilla seca
Si hacemos demasiada tortilla y sobra, lo natural es meterla en un tupper para comerla en otra ocasión, pero, cuando esto ocurre, en muchas ocasiones, pasados unos días, la tortilla sobrante se queda seca y poco apetecible.
Por suerte, existe un truquito para volver a transformar esa tortilla de patatas reseca en un manjar jugoso y delicioso. La clave está en elaborar una 'salsa' especial que echaremos por encima de la tortilla de patatas para que esta recobre todo su potencial.
Ingredientes para hacer una tortilla 'en salsa'
-Cebolla, 1/2
-Ajo, 1
-Hojas de perejil picado (un puñado)
-Hebras de azafrán (unas diez)
-Harina, 1 cucharada
-Sal (al gusto)
-Vino blanco, 1 vaso
-Agua, 2 vasos
-Aceite de oliva virgen extra (unas tres cucharadas)
Para su elaboración, cogeremos una sartén honda o una olla y echaremos en ella un chorro de aceite de oliva virgen extra (unas tres cucharadas). Lo pondremos a calentar y cuando esté listo echaremos la cebolla, el ajo y el perejil bien picados.
Antes de que se doren, agregamos la cucharada de harina y la rehogamos bien, mezclándolo todo. Después, incorporamos el vaso de vino blanco y las hebras de azafrán y dejamos hervir todo un par de minutos para que se evapore el alcohol.
Más tarde añadimos los dos vasos de agua y la sal al gusto. Cuando todo empiece a cocer, ponemos la tortilla de patatas seca en la sartén o la olla, a poder ser partida en porciones para que la salsa penetre bien en su interior.
Finalmente, hecho esto, bajamos el fuego, tapamos y dejamos que se cocine unos 15 minutos. Tras este tiempo, apagamos el fuego y permitimos que repose unos 10 minutos. ¡Nuestra tortilla reseca estará lista para comer!
Este truco es en realidad una parte de la receta de la tradicional 'tortilla guisada' y una excelente técnica culinaria que cada vez se hace menos, pero que ofrece resultados fantásticos y que 'devuelve a la vida' a los restos de tortillas de patatas del día anterior.