Una de las grandes preocupaciones diarias de muchas personas es la preparación de la cena, especialmente en verano, cuando se busca disfrutar de platos frescos y nutritivos sin pasar mucho tiempo en la cocina. Mantener una buena alimentación es crucial, y existen opciones interesantes para disfrutar de una cena rica en proteínas y baja en hidratos. Entre estas opciones, destaca una receta sencilla que se puede preparar en minutos con solo cuatro ingredientes.

Hablamos de una ensalada de canónigos, melón y pollo crujiente, perfecta para una cena saciante y rica en proteínas y fibra. Para dos porciones, se necesitarán 100 gramos de canónigos, 100 gramos de pechuga de pollo, una rodaja de melón piel de sapo y dos cucharadas de almendra en grano. El aliño puede ser una vinagreta clásica con aceite de oliva virgen extra, sal y vinagre o limón, según el gusto.

Beneficios de los canónigos para la salud

Los canónigos son una verdura muy ligera y saludable, con un ligero sabor anuezado y una textura crujiente que le dan un toque especial a las ensaladas. Sus hojas verdes, muy ricas en vitamina C, ácido fólico y minerales como el hierro o el potasio, hace que puedan ser consideradas toda una joya nutricional.

Los canónigos reúnen las tres vitaminas antioxidantes (A, C y E), que junto a unos valiosos fitonutrientes y su contenido en potasio y hierro hace que sean diuréticos y antianémicos. Aunque se trata de un alimento que posee una composición nutricional excelente, sus beneficios se ven limitados por las cantidades en las que habitualmente se consumen, ya que suele ser en porciones de 25-30 gramos.

Este alimento comenzó a consumirse como parte de la dieta campesina, pero actualmente se puede encontrar en una amplia cantidad y variedad de recetas, desde ensaladas a pizzas. En cualquier caso, conviene destacar cuáles son los principales beneficios de los canónigos para la salud:

• Ayuda a prevenir la anemia: debido a su elevado contenido en hierro, los canónigos son grandes aliados para prevenir la enfermedad de la "anemia ferropénica", razón por la que son especialmente recomendados para las mujeres con ciclos menstruales muy abundantes, en los que pierden grandes volúmenes de sangre. El cuerpo usa el hierro para la fabricación de hemoglobina, una proteína de los glóbulos rojos que traslada el oxígeno desde los pulmones a otras partes del organismo.
• Favorece la conciliación del sueño: el metabolismo de una persona requiere de al menos 6 horas diarias de descanso para poder recuperarse adecuadamente de la actividad que realiza en el día a día, de forma que, si se sufre de insomnio o el sueño se interrumpe de forma constante, se sentirá cansancio durante todo el día, pudiendo derivar en otros problemas de salud como estrés, ansiedad y depresión, además de poder afectar al rendimiento laboral y familiar.
  En este sentido, el canónigo, que es rico en ácido fólico, ayuda a favorecer el sueño y evitar la irritabilidad, haciendo que se pueda mantener el buen humor a lo largo de todo el día, además de favorecer un buen descanso.
• Combate la ansiedad: otra de las propiedades interesantes que están asociadas al consumo de canónigos es que ayuda a poder hacer frente a la ansiedad cuando no es demasiado acusada. Esto se debe a que actúan como sedantes, al pertenecer a la misma familia de plantas que la valeriana, permitiendo la regulación de los nervios y el estrés.
• Tienen efectos diuréticos y depurativos: en muchas dietas es recomendable incluir esta verdura por sus efectos diuréticos y depurativos, pero además son digestivos y favorecen la regulación del intestino. También fortalecen las uñas y el cabello.
• Protegen los huesos: además de todas las ventajas anteriores, hay que destacar que los canónigos proporcionan el 20% de la dosis diaria aconsejada de calcio para un adulto, lo que sumado a su contenido en vitamina K, es un alimento perfecto para la renovación de los tejidos óseos y que los huesos se encuentren bien protegidos frente a la osteoporosis y otras afecciones muy comunes durante la fase de envejecimiento.