Brandada de bacalao con pimientos del piquillo confitados
Estas copas de brandada de bacalao con pimientos del piquillo confitados pueden ser un aperitivo o un entrante muy sugerente para estas Navidades.
22 diciembre, 2018 10:14- Total: 30 min
- Comensales: 2
Hay elementos de nuestra vajilla como copas, vasos o tazas que además de su evidente desempeño en servir diferentes tipos de bebidas son elementos fantásticos para servir maravillosos aperitivos de una forma muy vistosa y más original.
Ingredientes
- Bacalao desmigado desalado, 200 g
- Pimientos del piquillo, 300 g
- Dientes de ajo, 6
- Una patata mediana
- Nata líquida, 200 ml
- Leche entera, 100 ml
- Azúcar, 5 g
- Cebollino fresco
- Pimienta negra recién molida
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
En esta receta de copas de brandada de bacalao y pimientos del piquillo confitados vamos a jugar con la transparencia que nos brinda una copa de vidrio para servir diferentes capas de elaboraciones cremosas, un puré de pimientos confitados y una suave brandada de bacalao. Una forma de comer esta combinación de ingredientes que tan bien funciona de una manera mucho más fina y elegante, de modo que resulte una estupenda opción para servir en una ocasión señalada.
Cómo hacer unas copas de brandada de bacalao con pimientos del piquillo confitados
01: Cocemos la patata en la nata y la leche
En primer lugar, juntamos la leche y la nata líquida en un cazo o cazuela pequeña. Calentamos la mezcla hasta que comience a hervir, momento en el que bajaremos el fuego hasta conseguir que hierva a un borboteo muy suave.
Pelamos la patata y la cortamos por la mitad a lo largo y posteriormente de nuevo a la mitad, otra vez a lo largo. Posamos cada cuarto de patata sobre la parte plana y los cortamos en trozos de 2-3 mm, como si cortáramos la patata para hacer tortilla.
Añadimos la patata ya cortada a la nata y a la leche que están en el fuego, salpimentamos ligeramente y cocemos la patata en los lácteos a fuego suave durante unos 20 minutos, o durante el tiempo necesario para que la patata esté bien cocida y se deshaga al ser presionada. Removemos con mucha frecuencia ya que si ya de por sí este tipo de lácteos tienden a agarrarse al fondo de la olla, todavía será más propenso al contar con el almidón de la patata.
02: Terminamos la brandada de bacalao
Tras cocer la patata picamos las migas de bacalao hasta que estén bien menudas.
Calentamos 4 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra en una sartén y una vez esté bien caliente añadimos 3 dientes de ajo picados finamente. Cuando empiece a bailar el ajo, añadimos el bacalao desalado picado y cocinamos a fuego muy lento un par de minutos para que el bacalao suelte toda su gelatina. Colamos el bacalao para separarlo del aceite y de la gelatina que haya soltado.
Una vez cocida la patata en la nata y la leche, retiramos la cazuela del fuego y añadimos en ella el bacalao y el ajo ya escurridos del aceite. Chafamos todo el conjunto con un prensador manual de patatas o con una batidora de mano. Una vez la brandada de bacalao haya adquirido una textura cremosa casi como de paté, añadimos poco a poco el aceite en el que hemos cocinado el bacalao mientras seguimos batiendo. Continuamos el proceso hasta que todo el aceite se haya integrado en la brandada de bacalao y esta haya ganado cuerpo.
Volcamos la brandada de bacalao sobre una fuente para que se enfríe y la tapamos con film transparente, haciendo que el film entre en contacto con la superficie de la brandada. Así evitaremos el contacto del aire con la superficie de la brandada y conseguiremos que no se forme una costra seca.
03: Confitamos los pimientos del piquillo y hacemos un puré con ellos
Por otro lado, para confitar los pimientos debemos escurrirlos del líquido (que no tiraremos) y cortarlos en juliana en tiras muy finitas.
Añadimos a una sartén los pimientos del piquillo en tiras, 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra y el líquido que hemos reservado de los pimientos. Añadimos también a la sartén un poco de sal, el azúcar y los tres dientes de ajo restantes, enteros y pelados.
Cocinamos los pimientos del piquillo a fuego muy suave y con la tapa puesta para que se confiten muy poco a poco y queden bien suaves y melosos. Confitamos los pimientos del piquillo al menos 30 minutos.
Una vez los pimientos del piquillo estén confitados, apartamos una pequeña cantidad para decorar nuestras copas de brandada de bacalao. El resto lo trituramos con la batidora hasta obtener un puré de piquillos confitados de un color intenso. Esperamos a que este puré pierda temperatura antes de servirlo.
04: Montamos las copas con el puré de pimientos y la brandada de bacalao
Llenamos una copa transparente con una capa del puré de piquillos confitados ya frío o a temperatura ambiente. Sobre esa capa, añadimos otra capa de nuestra brandada de bacalao, que tampoco debe estar muy caliente. Por último, coronamos el centro de la copa añadiendo unas tiras de pimientos del piquillo confitados sobre la brandada de bacalao.
05: Servimos las copas de brandada de bacalao con pimientos del piquillo confitados
Servimos las copas de brandada de bacalao con pimientos del piquillo confitados añadiendo un poco de cebollino fresco recién picado por encima.
Resultado final
Estas copas de brandada de bacalao con pimientos del piquillo confitados pueden ser un aperitivo o un entrante muy sugerente para estas Navidades. Además de tener un aspecto muy llamativo y apetecible, la suavidad de la brandada contrasta de maravilla con la esencia de los pimientos del piquillo confitados.
Y por si no fuera poco, esta receta también cumple a la perfección con otro de los máximos que todos deberíamos perseguir a la hora de elegir recetas para preparar en estas fiestas con tanto trasiego: no resulta pesada, es económica y es rápida y sencilla de preparar y de degustar.
En este caso hemos servido la brandada de bacalao y la crema de pimientos del piquillo confitados en unas copas trasparentes, pero podéis servirlas en otro tipo de copas (por ejemplo en unas de dry martini, si queréis jugar del mismo modo con la forma de cono invertido como la de las copas que yo he utilizado) o en pequeños vasitos o de la forma más sugerente que se nos ocurra.