No hay receta más popular para compartir entre amigos en España que unos huevos rotos. Eso es así y quien diga otra cosa miente. También es cierto que hay muchísimas formas de prepararlos y que los hay desde muy desastrosamente malos hasta algunos convertidos en bocados altamente gourmet, esferificados y todo casi como tortilla deconstruida de Ferran Adrià.

Pero ¿en qué consisten los huevos rotos? Es un plato que el nombre lo dice todo: cualquier cosa en la base y unos huevos fritos encima para romperlos y mezclarlos con lo que se haya puesto debajo. Los más clásicos, esos que no pueden faltar en cualquier carta de los restaurantes del centro de Madrid, llevan patatas y jamón, pero como ancha es Castilla, las posibilidades son las que nuestra memoria, nuestra nevera o nuestras ganas nos den.

Los más famosos, con nombre propio, son los huevos rotos al estilo Lucio (de Casa Lucio, en Madrid) que sólo llevan huevo y patatas y es curioso porque es justo mencionar que también hay otros lugares que los conocen como huevos estrellados. Pero viene a ser la misma cosa. Un poco más modernos son los huevos rotos con tartar de bonito aunque, pensándolo bien, ¿podríamos llamar huevos rotos con pisto a dos huevos sobre un poco de pisto manchego? Y tanto que sí. Aunque si hay más pisto por debajo y sólo un huevo encima tendríamos que llamarlo «pisto con huevo». Así son las cosas.

La gracia de este plato es que los huevos se rompen en la mesa y es justamente ahí donde la receta difiere de las patatas revueltas con huevo o de cualquier revuelto que se precie, ya sea de espinacas, de champiñones, de gambas o de verduras de primavera. Para esta receta, los ingredientes son sencillos y pocos, por lo que es perfecta para resolver en diez minutos y tener lista una comida contundente.

En la base, un poco de chistorra fresca troceada que también podría ser morcilla, pollo salteado o incluso unos riñoncitos. Luego también unas habitas ya fritas, de esas que vienen en un buen bote en conserva en aceite, que podrían sustituirse con unos espárragos verdes finos o con unos champiñones. El añadido de las patatas chips de bolsa le dará crujiente y un rollo muy bueno al conjunto final y ya sólo quedará freír los huevos. Fácil, ¿verdad?

Receta de huevos rotos con habitas y chistorra

Paso 1

Trocear la chistorra en porciones de aproximadamente dos centímetros. Disponer la chistorra en una sartén grande y empezar a calentar. Sin nada de aceite, será más que suficiente la propia grasa que vaya soltando la chistorra en la sartén. Hacerlo a fuego medio, para que se vaya dorando por fuera pero que también se cocine por dentro. Durante unos 5 minutos aproximadamente.

Paso 2

Escurrir bien las habitas e, incluso, lavarlas debajo del agua fría para quitarles el posible resto de sabor a bote. Incorporarlas en la sartén y mezclar con la chistorra durante un par de minutos. Para que se doren apenas ligeramente pero que cojan buena temperatura. Por último, agregar las patatas chips un poco machacadas con las manos. No será necesario agregar casi sal para esta receta.

Paso 3

Poner a calentar abundante aceite de oliva en una sartén honda, hasta que esté bien caliente. Agregar el diente de ajo con la piel, simplemente un poco roto, y dejar que baile en el aceite caliente medio minuto. Cascar entonces el huevo, con el aceite bien caliente, y dejar que se fría él solo sin tocarlo durante 40 segundos. Tras este tiempo, retirar y poner un poco de sal por encima.

Paso 4

Servir el salteado de chistorra, habitas y patatas chips en una cazuela, plato o bandeja y poner por encima los huevos recién fritos. Romper los huevos y mezclar todo bien.