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Las aceitunas son un ingrediente altamente nutritivo cuyo uso resulta muy adecuado en multitud de recetas, en las que se cocinan con un sinfín de ingredientes, siendo las protagonistas del plato ya terminado.

Las verdes, como las aceitunas Manzanilla, realzan los guisos de carne o de verduras y dan un punto maravilloso a los sofritos, podéis comprobarlo echando un buen puñado de aceitunas la próxima vez que hagáis un pisto y vais a ver qué subidón de umami le vais a dar a la receta.

En la receta de hoy, otro ejemplo de lo que os estoy contando, os traemos un picadillo criollo al estilo cubano al que le hemos dado una pequeña vuelta y en vez de servirlo con arroz blanco y el plátano frito de guarnición, hemos usado el plátano para hacer una especie de tortita más fina con la que poder hacer un taco que junte todos los sabores en un único bocado. Una combinación de sabores nos transporta directamente al malecón de La Habana.

Si hay un ingrediente que no puede faltar en el picadillo habanero son las aceitunas y con las aceitunas Manzanilla de Aceitunas de España conseguiremos un plato a la altura de las recetas elaboradas por grandes chefs que hemos conocido gracias a la campaña llevada a cabo por Aceitunas de España para reinventar la aceituna como ingrediente en la cocina.

Cómo hacer tacos de picadillo con aceitunas Manzanilla

Ingredientes

  • Carne picada de ternera y cerdo, 500 g
  • Aceitunas Manzanilla sin hueso, 100 g
  • Cebolla, 1 ud
  • Zanahoria, 1 ud
  • Pimiento verde, 1 ud
  • Pimiento rojo, ½ ud
  • Vino blanco, 50 ml
  • Salsa de tomate casera, 200 g
  • Alcaparras, 30 g
  • Pasas, 30 g
  • Patatas, 1 ud
  • Aceite de oliva virgen extra, 3 cucharadas
  • Aceite para freír, cantidad suficiente

Para la tortilla de plátano

  • Plátano verde de freír (plátano macho), 3 ud
  • Aceite para freír, cantidad suficiente
  • Sal
  • Pimienta

Para servir

  • Aceitunas Manzanilla con hueso
  • Tomate pequeño, 1 ud
  • Cebolleta china, 1 ud
  • Cilantro
  • Sal
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Vinagre
  • Chile, opcional

Paso 1

El picadillo criollo es un plato tan simple como delicioso, su preparación es tan sencilla como hacer un sofrito con la cebolla, la zanahoria y los pimientos cortados muy finos, que pocharemos en aceite de oliva virgen extra con sal al gusto.

Paso 2

Mientras se van pochando las verduras, salpimentamos la carne que añadiremos a la cazuela cuando las verduras estén tiernas. La mejor forma de hacerlo será apartando las verduras hacia el borde de la cazuela y echando la carne en el centro, removiéndola hasta que se dore por todas partes. Cuando la carne esté dorada, mezclamos todo, subimos el fuego a tope, añadimos el vino blanco, dejamos cocinar a fuego vivo hasta que deje de oler a alcohol, añadimos la salsa de tomate, las alcaparras y las aceitunas Manzanilla sin hueso, bajamos el fuego al mínimo y dejamos cocinar durante unos 10 o 15 minutos.

Paso 3

Mientras se termina de hacer el picadillo, podemos aprovechar para freír la patata cortada en dados de menos de un centímetro.

Paso 4

Aprovechamos también pare freír el plátano cortado en rodajas gruesas. El plátano de freír, cuando está verde resulta difícil de pelar de la forma con la que estamos acostumbrados a pelar los plátanos y resulta más cómodo cortar rodajas de 1,5 centímetros sin pelar y luego quitarles la piel.

Paso 5

Cuando estén doradas se ponen entre dos papeles absorbentes y se aplastan lo máximo que sea posible, podemos ayudarnos de un rodillo o de una prensa de las que se usan para hacer tortillas mexicanas. En esta ocasión, no le vamos a dar una segunda fritura al plátano, porque no queremos que quede crujiente, sino que queremos que nos quede una lámina flexible que será la base de nuestro taco.

Paso 6

Para servir los tacos, preparamos un aliño sencillo que aportará frescor al bocado. Para ello picamos finamente el tomate, la cebolleta china, el chile y el cilantro y los aliñamos con sal, aceite y vinagre al gusto. Podemos poner también unas aceitunas Manzanilla con hueso y un cuenco con más salsa de tomate casera para que los comensales, si así lo desean, puedan añadirla a sus tacos.

Paso 1

El picadillo criollo es un plato tan simple como delicioso, su preparación es tan sencilla como hacer un sofrito con la cebolla, la zanahoria y los pimientos cortados muy finos, que pocharemos en aceite de oliva virgen extra con sal al gusto.

Paso 2

Mientras se van pochando las verduras, salpimentamos la carne que añadiremos a la cazuela cuando las verduras estén tiernas. La mejor forma de hacerlo será apartando las verduras hacia el borde de la cazuela y echando la carne en el centro, removiéndola hasta que se dore por todas partes.

Cuando la carne esté dorada, mezclamos todo, subimos el fuego a tope, añadimos el vino blanco, dejamos cocinar a fuego vivo hasta que deje de oler a alcohol, añadimos la salsa de tomate, las alcaparras y las aceitunas Manzanilla sin hueso, bajamos el fuego al mínimo y dejamos cocinar durante unos 10 o 15 minutos.

Paso 3

Mientras se termina de hacer el picadillo, podemos aprovechar para freír la patata cortada en dados de menos de un centímetro.

Paso 4

Aprovechamos también para freír el plátano cortado en rodajas gruesas. El plátano de freír, cuando está verde resulta difícil de pelar de la forma con la que estamos acostumbrados a pelar los plátanos y resulta más cómodo cortar rodajas de 1,5 centímetros sin pelar y luego quitarles la piel.

Paso 5

Cuando estén doradas se ponen entre dos papeles absorbentes y se aplastan lo máximo que sea posible, podemos ayudarnos de un rodillo o de una prensa de las que se usan para hacer tortillas mexicanas. En esta ocasión, no le vamos a dar una segunda fritura al plátano, porque no queremos que quede crujiente, sino que queremos que nos quede una lámina flexible que será la base de nuestro taco.

Paso 6

Para servir los tacos, preparamos un aliño sencillo que aportará frescor al bocado. Para ello picamos finamente el tomate, la cebolleta china, el chile y el cilantro y los aliñamos con sal, aceite y vinagre al gusto. Podemos poner también unas aceitunas Manzanilla con hueso y un cuenco con más salsa de tomate casera para que los comensales, si así lo desean, puedan añadirla a sus tacos.