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Dicen que la veteranía es un grado, por eso las abuelas se las saben todas para salir airosas ante cualquier situación. A una de mis abuelas no le apasionaba cocinar, por eso se sabía todos los trucos para acabar rápido. Esas pequeñas píldoras de sabiduría fueron heredadas por mi madre, fiel defensora de la Magefesa -la olla a presión que todo el mundo tenía en casa a mediados del siglo pasado- y de atajar siempre que la receta lo permitiese.

La preparación de la cena de Nochebuena y la comida de Navidad nunca estuvo alejada de esta visión práctica de la existencia, al menos frente a los fogones. En el caso del cordero asado, el uso del horno siempre fue una motivación más para ir deprisa, no fuera a ser que el recibo de la luz nos diera un susto. 

Así pues ¿para qué tener el horno encendido tres horas para asar una pierna de cordero si podemos asar el cordero -con sus patatas de guarnición- en apenas 25 minutos? La solución: asar chuletillas de cordero al horno, que así se pueden cocinar muchas de una vez y no hay que ir por tandas en la sartén. Y, de paso, aprovechar el horno encendido para hornear unas patatas y tener listo el plato principal ensuciando solo una fuente de horno. Más fácil y más rápido para comer cordero en Navidad, imposible.

La receta de cordero al horno más rápida

Asar chuletillas de cordero en el horno no solo es una opción rapidísima, sino que también es una receta con la que casi no se ensucia la cocina y no se genera el olor penetrante que deja el cordero cuando se cocina a la plancha. 

Otra ventaja es que no hay que complicarse la vida preparando la carne por un lado y la guarnición por otro y, después, lidiar con el estrés de conseguir que todo llegue caliente a la mesa, pues con esta receta se cocina todo en la bandeja del horno y en poco más de media hora tenemos lista la comida. 

Se pueden usar chuletillas de cordero lechal o recental, pero el truco para queden deliciosas es usar siempre chuletas de palo, que tienen más grasa y, por eso, resultan mucho más tiernas y jugosas. Para este tipo de cocción no es recomendable utilizar chuletas de pierna, porque tienen, aproximadamente, la mitad de grasa que las de palo y podrían quedar más secas y duras.

Consejo de Cocinillas

Cuando una receta nos pida regar el contenido de la bandeja en mitad de la cocción con un líquido a temperatura ambiente, como puede ser un vino blanco, caldo o, simplemente, agua, hay que tener en cuenta que las fuentes de vidrio y cerámica son altamente sensibles a los choques térmicos y podrían romperse o agrietarse.

Si la cantidad de líquido a incorporar es pequeña, la echaremos con cuidado de que caiga solo sobre los alimentos. Si hay que añadir bastante cantidad, lo mejor es utilizar una fuente o bandeja metálica.

Ingredientes para hacer chuletillas de cordero al horno

  • Chuletillas de cordero recental, 16 ud
  • Patatas medianas, 4 ud
  • Ajo, 3 o 4 dientes
  • Cebolleta, 1 ud
  • Vino blanco, 4 cucharadas
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal, al gusto
  • Especias al gusto (tomillo, romero, mejorana, orégano...)

Paso 1

Precalentamos el horno a 225 ºC con calor arriba y abajo sin ventilador.

Paso 2

Pelamos las patatas y las cortamos en rodajas de unos 3 milímetros de espesor.

Paso 3

Engrasamos la bandeja del horno con aceite de oliva virgen extra y, sobre ella, colocamos las patatas sin amontonarlas, las salamos, las espolvoreamos con especias secas al gusto y regamos con un hilillo de aceite de oliva virgen extra.

Paso 4

Horneamos durante 15 minutos en la posición media del horno. Como cada horno es un mundo, la primera vez conviene estar atentos y vigilar que las patatas no se quemen. Lo que necesitamos es que estén tiernas y se empiecen a dorar por los bordes.

Paso 5

Sacamos del horno, regamos con el vino blanco, repartimos por encima la cebolleta cortada en rodajas finísimas y los ajos cortados en trozos sin pelar.

Paso 6

Ponemos encima las chuletillas de cordero teniendo cuidado de que no se amontonen, salamos, regamos con otro hilillo de aceite, espolvoreamos con perejil seco o especias al gusto, metemos de nuevo la bandeja en el horno, bajamos la temperatura a 200 ºC y las dejamos 5 minutos.

Paso 7

Apagamos el horno, subimos la bandeja y encendemos el grill para que se doren durante unos 5 minutos. Aquí conviene vigilar casi durante todo el tiempo porque cada horno es un mundo y a la que nos descuidemos se podrían quemar o secarse en exceso.

Paso 8

Servimos inmediatamente sacando la bandeja de horno a la mesa para que no pierdan calor al emplatar. Podemos acompañarlas de algo sencillo como una ensalada de tomate y orégano.

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