Encontrar actividades que involucren a los niños en la cocina puede ser divertido y educativo. Y a veces también necesario para cuando las jornadas escolares disminuyen o se eliminan. Una excelente opción para introducirlos al mundo culinario es este risotto de tomate hecho completamente al horno. Esta receta es muy fácil de preparar y ofrece una oportunidad ideal para que los niños, a partir de unos 8 años, experimenten en la cocina y demuestren su creatividad culinaria.

El risotto es un plato italiano clásico que generalmente se cocina al fuego, removiendo sin parar, pero en esta versión lo haremos completamente en el horno. Como se haría cualquier arroz al horno típico valenciano. La base principal de nuestro risotto será el tomate, ya que utilizaremos tanto tomates naturales como tomate triturado para obtener un sabor delicioso y lleno de frescura.

Para esta aventura, pues así se lo tomarán los más pequeños, necesitaremos un arroz de las variedades Arborio o Carnaroli, los habituales para risottos, pero también quedará muy bien con el J Sendra que se encuentra en muchos supermercados. Estos tipos de arroz son perfectos para hacer risotto debido a su textura cremosa y su capacidad de absorber los sabores de los ingredientes que le añadamos.

Preparar esta receta con los niños será una experiencia emocionante. Pueden ayudar a lavar y cortar los tomates maduros en trozos pequeños, lo cual es una excelente manera de desarrollar sus habilidades motoras y aprender sobre los diferentes tipos de ingredientes. También podrán mezclar todos los ingredientes, con cuidado de no quemarse porque el recipiente saldrá del horno caliente, e incluso pueden ajustar las cantidades de especias al gusto de cada uno. Esta tarea será genial para que investiguen sobre el fascinante mundo de las especias.

Como trucos indispensables para este arroz, es clave que el horno se precaliente con anterioridad, mezclar todos los ingredientes bien para que se cocine el arroz de forma uniforme y añadir el caldo o agua siempre caliente.

Cuando el risotto esté listo, es importante que los niños tengan cuidado al manipular el recipiente caliente. Pueden ayudar a mezclar el risotto con un tenedor y, finalmente, decorar cada plato individual con queso parmesano rallado. Este paso final les permitirá poner su toque personal en la presentación y disfrutar de su creación culinaria. Será genial también darles unos tomates Cherry que pueden añadir al final o unas hojas de albahaca con las que lo decorarán.

El risotto de tomate al horno es una opción maravillosa para que los niños se involucren en la cocina y aprendan a preparar platos deliciosos. También se les podrían plantear otras recetas de arroz como el risotto cuatro quesos o el risotto de beicon y zanahoria.  

Cómo hacer risotto de tomate al horno

Ingredientes

  • Cebolla, 1 u
  • Dientes de ajo, 2 u
  • Mantequilla, 35 g
  • Aceite de oliva, 1 cucharada
  • Tomates, 2 u
  • Tomate triturado natural, 400 g
  • Arroz redondo para risotto, 200 g
  • Agua o caldo, 500 ml
  • Orégano, 1/2 cucharadita
  • Sal, c/s
  • Pimienta negra molida, al gusto
  • Parmesano rallado, 100 g

Paso 1

Preparar los ingredientes

Paso 2

Hornear el sofrito

Paso 3

Hornear el arroz

Paso 4

Terminar con queso y mantequilla

Paso 1

Pelar la cebolla y los dientes de ajo. Trocearlos ligeramente y picarlos finamente. Para los niños, lo ideal es ponerlos en un robot de cocina o vaso triturador y triturarlos ahí dentro.

Paso 2

Precalentar el horno a 180 ºC y en la olla baja donde se vaya a preparar el plato disponer la cucharada de aceite de oliva, la cebolla y los ajos picados y, por encima, la mantequilla repartida. Incorporar también los tomates lavados y troceados. Añadir un poco de sal e introducir en el horno durante 10 minutos hasta que se ve que se vuelve transparente.

Paso 3

Agregar entonces el tomate triturado y el orégano y volver a introducir en el horno 15 minutos más. Será entonces el momento de añadir el arroz, mezclar bien, y también el agua caliente. Sal y pimienta negra. Llevar de nuevo al horno, tapado, durante 20 minutos subiendo la potencia a 200 ºC.

Paso 4

Tras ese tiempo, destapar con mucho cuidado y agregar el queso rallado y una cucharada de mantequilla. Mantecar, tapar y dejar reposar entre dos y tres minutos más antes de servir.