El kimbap gimbap es uno de los platos de comida callejera más populares de Corea. Es un rollo de arroz envuelto en alga nori que se rellena con vegetales, huevo y, a veces, también palitos de surimi o spam -un fiambre de carne cocida parecido al chopped o al jamón de York-. Su aspecto recuerda bastante a los maki sushi japoneses.

El kimbap, que literalmente significa rollo de algas marinas (kim) y arroz (bap), se cree que deriva del bokksam, una práctica coreana que consiste en envolver arroz con otro alimento como lechuga, carne loncheada o algas para atraer la buena fortuna.

[Bibimbap, la receta de arroz con verduras más popular de Corea]

Cuando el kimbap tiene forma circular se denomina mayak kimbap, pero también puede tener forma triangular y entonces se llama samgak kimbap. En Corea, son fáciles de encontrar en las tiendas de conveniencia, supermercados y puestos de comida callejera, pero hacerlos en casa es más sencillo incluso que hacer la versión japonesa y son excelentes para llevar en la fiambrera y comer en el trabajo o en un picnic.

Las diferencias con el sushi japonés

Aunque resulta fácil describir el kimbap como "el sushi coreano", pues al verlo es la primera asociación que nos vendrá a la cabeza, el kimbap, como alimento y forma de expresión cultural, ha demostrado una y otra vez que es un plato con entidad propia.

El arroz de sushi generalmente se sazona con vinagre, sal y azúcar, mientras que el arroz para kimbap se puede dejar solo o sazonarse con cualquier combinación de vinagre de arroz, aceite de sésamo, semillas de sésamo, azúcar y sal. No es igual que el sushi, el kimbap no se come acompañado de una salsa para sumergir, lo que lo hace mucho más adecuado como comida para llevar.

Podría decirse que la única similitud que comparten los dos alimentos de orígenes culturales separados, aparte del parecido físico, es su capacidad camaleónica. Ambos se pueden personalizar con muchos ingredientes diferentes. Una combinación tradicional para rellenar el kimbap consiste en danmuji (rábano amarillo en escabeche), zanahorias salteadas, espinacas ligeramente sazonadas y tiras de tortilla de huevo.

Para obtener más proteínas, los cocineros caseros coreanos pueden agregar tiras de fiambre, bulgogi -tiras de carne de ternera o carne picada, o trozos de surimi. Para una versión vegetariana puede cambiarse el huevo por aguacate o simplemente utilizar más cantidad de las verduras según los gustos de cada uno.

A decir verdad, el kimbap es altamente personalizable y dentro puede meterse casi de todo, incluso pueden aprovecharse sobras de otros platos. De la misma manera, el kimbap  que sobra se puede rebozar en huevo y freírse ligeramente y está delicioso.

Ingredientes

Para el arroz (salen 5 rollitos)

  • Arroz blanco de grano corto, 400 g
  • Agua, 600 ml
  • Sal
  • Aceite de sésamo tostado, 1 cucharada
  • Alga nori, 5 láminas

Para el relleno

  • Huevos, 2 ud
  • Espinacas, 300 g
  • Aceite de sésamo tostado, 1 cucharada
  • Zanahoria, 1 o 2 ud
  • Surimi, 10 ud (depende de la longitud de los palitos)

Paso 1

Cocer arroz

Paso 2

Preparar rellenos

Paso 3

Montar kimbap

Paso 1

Lavamos bien el arroz con agua fría hasta que salga limpia. Lo ponemos en una cazuela con tapa y añadimos el agua. Dejamos que se ablande el arroz durante 30 minutos y lo ponemos al fuego a máxima potencia hasta que rompa a hervir. Reducimos el fuego y lo dejamos cocinar entre 20 y 25 minutos con la tapa puesta hasta que se haya absorbido toda el agua.

Retiramos del fuego y dejamos reposar otros 15 minutos sin destapar la olla.

Paso 2

Sacamos el arroz y lo extendemos sobre una tabla de madera, lo sazonamos con sal y aceite de sésamo mientras lo abanicamos y le damos vueltas con una cuchara de madera para que se enfríe lo más rápido posible.

Paso 3

Para preparar los rellenos, batimos los huevos con una pizca de sal y los cuajamos en una sartén como si fuera una crepe, es decir, engrasamos la sartén, la ponemos al fuego y, cuando esté caliente, echamos el huevo batido, lo dejamos un par de minutos hasta que se cuaje y le damos la vuelta para que se cocine por el otro lado. Cuando esté lista la tortilla, la pasamos a una tabla de cortar y la cortamos en tiras de un centímetro de ancho.

A continuación, pelamos las zanahorias y las cortamos en juliana fina. Ponemos a calentar una cucharadita de aceite en una sartén a fuego fuerte y las salteamos durante un minuto.

Finalmente, lavamos las espinacas y, sin escurrirlas demasiado, las cocinamos en la sartén caliente hasta que se ablanden y se evapore el agua que suelten. Luego las escurrimos muy bien y las sazonamos con aceite de sésamo tostado, semillas de sésamo, sal y pimienta.

Paso 4

Para hacer el rollito, forramos una esterilla de bambú con papel film, ponemos la lámina de alga nori y, sobre ella, disponemos una capa de arroz empezando por uno de los bordes y dejando un centímetro libre en el borde opuesto.

Paso 5

Disponemos las tiras de tortilla, las zanahorias y las espinacas sobre el arroz, enrollamos y cortamos en rodajas.