- Total: 1 h 15 min
- Comensales: 4 - 6
La lasaña italiana es un plato cuya historia se remonta a la antigua Roma, aunque su forma y preparación han evolucionado a lo largo del tiempo. Originalmente, la lasaña romana no se asemejaba exactamente a la versión moderna que conocemos hoy en día.
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En la antigua Roma, se cree que, por influencia griega, se utilizaban una especie de láminas planas de masa llamadas lagănum para hacer esa primera lasaña. Estas láminas eran cortadas en tiras y cocidas en agua, similar a cómo se cuece la pasta en la actualidad.
A lo largo de los siglos, la receta de la lasaña fue evolucionando. En la Edad Media, los italianos comenzaron a utilizar capas de pasta y otros ingredientes como carne y queso para crear un plato más parecido a la lasaña actual. La combinación de capas de pasta, salsa de carne y queso se convirtió en la versión más reconocida y popular del plato. La primera receta escrita que se conserva es del italiano Mario Borgogno y data del año 1316.
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El término lasagna (láminas de pasta) se utiliza en Italia tanto para describir las láminas de pasta individual como el plato en sí. Con el tiempo, la lasaña se fue consolidando como un plato tradicional de la cocina italiana y se popularizó en diferentes regiones del país.
Hoy en día, la lasaña sigue siendo un plato icónico y seña de identidad de la gastronomía italiana y se ha extendido a muchas otras partes del mundo, con numerosas variaciones y adaptaciones en diferentes culturas culinarias. Como dato curioso, decir que el país que más lasaña consume no es Italia, sino Gran Bretaña, hasta el punto de que hace algunos años un artículo publicado en Daily Telegraph reclamaba el origen británico del plato.
Cómo hacer una lasaña de pollo y setas
Ingredientes para hacer una lasaña de pollo y setas
Para la lasaña
- Láminas de pasta para lasaña, 12 ud
- Restos de pollo asado o cocido sin huesos, 500 g
- Setas o champiñones, 300 g
- Cebolla mediana, 1 ud
- Ajo, 3 dientes
- Mantequilla, 20 g
- Aceite de oliva virgen extra, 2 cucharadas
- Salsa de tomate casera, 800 g
- Caldo de pollo, 250 ml
- Mozzarella rallada, 180 g
- Parmesano rallado, 80 g
- Sal
- Pimienta
Para la bechamel
- Leche, 300 ml
- Harina de trigo, 25 g
- Mantequilla, 25 g
- Sal
- Pimienta
- Nuez moscada
Paso 1
Preparar el relleno
Paso 2
Hidratar o cocer la pasta
Paso 3
Preparar la bechamel
Paso 4
Montar la lasaña
Paso 5
Hornear
Paso 6
Servir
Paso 1
En una sartén grande, ponemos a fundir la mantequilla junto con el aceite de oliva a fuego medio.
Paso 2
Cuando la mantequilla y el aceite estén calientes, pero sin humear, añadimos la cebolla y el ajo picados en brunoise y los pochamos hasta que estén tiernos y translúcidos.
Paso 3
Añadimos a la sartén las setas cortadas en láminas y las cocinamos hasta que estén doradas y hayan reducido su tamaño. Las setas, al calentarse, soltarán agua y, una vez que se haya evaporado esta, empezarán a tostarse y cogerán un bonito color dorado. Ese es el punto que buscamos.
Paso 4
Cuando las setas estén doradas, es el momento de incorporar la carne de pollo desmenuzada y mezclar todo bien. Cocinamos durante unos minutos para que los sabores se integren.
Paso 5
Añadimos la salsa de tomate y el caldo de pollo en la sartén. Mezclamos todo y dejamos que el relleno de nuestra lasaña se cocine a fuego bajo (al chup chup) durante unos 20 minutos. Durante la cocción, lo probaremos y, si es necesario, rectificaremos el punto de sazón añadiendo sal y/o pimienta si fuese necesario.
Paso 6
A no ser que se trate de pasta precocida de la que se cuece directamente en el horno con la salsa, mientras se está haciendo esta, podemos aprovechar para hidratar las láminas de pasta o cocerlas según indiquen las instrucciones del paquete.
Paso 7
Y mientras tanto, también podemos aprovechar para preparar la bechamel: en un cazo de tamaño mediano, calentamos la mantequilla hasta que se funda, añadimos después la harina y la cocinamos durante un par de minutos para que la harina pierda el sabor a crudo. Finalmente, añadimos la leche poco a poco mientras vamos removiendo con unas varillas para que no se formen grumos.
Añadimos sal y pimienta al gusto y, si se desea, un poco de nuez moscada, continuamos removiendo hasta que espese ligeramente. Retiramos del fuego y reservamos.
Paso 8
En un molde para lasaña, colocamos una capa delgada de la mezcla de pollo y setas en el fondo. A continuación, colocamos una capa de láminas de pasta para lasaña sobre la mezcla y, sobre ella, repartimos un par de cucharadas de bechamel. Repetimos la operación dos veces más.
Paso 9
Sobre la última capa de pasta añadimos toda la bechamel restante y cubrimos con los quesos rallados.
Paso 10
Tapamos la lasaña con papel de aluminio y horneamos durante 30 minutos en horno precalentado a 180 ºC. Pasado este tiempo, retiramos el papel de aluminio y horneamos durante unos 10 minutos más para que se dore la capa superior de queso que ya se habrá fundido.
Paso 11
Una vez que la lasaña esté dorada y burbujeante, la sacamos del horno y la dejamos reposar durante unos minutos antes de servirla. Opcionalmente, se puede decorar con algunas hojas de albahaca fresca.