Hoy os traigo un truquito de esos salvavidas que me encantan y que en alguna ocasión me ha sacado de apuros cuando he querido terminar algún postre que he llevado a casa de alguien y en el que he preferido poner la nata al final para que no se estropeara por el camino, pero luego al llegar allí resulta que no había batidora.
También aprovecho para confesar que soy incapaz de montar nata con las varillas manuales, llamadme floja, pero me canso mucho antes de que la nata esté mínimamente montada.
Cómo montar nata sin batidora en menos de un minuto
Afortunadamente, se puede montar nata sin batidora en un momento y sin tener que dejarse el brazo en el intento. Lo único que necesitamos es que sea nata para montar -obvio-, que esté bien fría -si no, no monta ni a máquina- y un bote de cristal con tapa que tenga como mínimo el doble de volumen que la nata que queremos montar y que si tenemos tiempo es aconsejable que lo enfriemos metiéndolo unos 5 minutos en el congelador.
El método es simple, echar la nata en el bote de cristal, sola o con alguna esencia para dar sabor y azúcar, eso ya va en gustos, cerrar el bote con su tapa, y agitar durante unos 45 segundos con alegría, como hacen en el vídeo que os dejo más abajo.
A decir verdad, con la batidora eléctrica se tarda un poco más, y si necesitamos montar poca cantidad, por ejemplo, cuando nos apetecen unas fresas con nata, el método es fabuloso, porque podemos montar la nata y en el mismo frasco servirnos las fresas, que cuando uno está solo en casa lo que busca es ser práctico antes que se “cuqui”, ¿o no?
Imagen de portada| JFXie