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Lejos de todas las tartas de queso al horno que tan de moda están en España (también se pueden tunear convirtiéndolas en tartas de queso y chocolate blanco tipo coulant, por ejemplo), las tartas de queso frías - que no necesitan cocción de ningún tipo - son también fabulosas y nos permiten preparar postres deliciosos para el verano sin morir de calor. Esta, probablemente, será una receta que se repita en casa muchas veces gracias a la textura cremosa y aireada, casi etérea, y también gracias a lo fácil y rápido que es hacerla.
Lo único más importante es ir siguiendo los pasos y los tiempos de refrigeración / congelado. Porque sí, otra cosa buena de esta tarta es que congela fenomenal antes de ponerle la fruta por encima, que se puede personalizar con cualquier tipo de fruta y que la podremos tener hecha con toda la antelación que queramos.
Esta tarta no necesita huevos, solamente nata, crema agria y zumo de limón y se podría agregar cualquier queso en crema que se quisiera para darle más o menos potencia de sabor. Claro, sin tener que pasar por el horno el margen de error es mínimo así que con esta tarta de queso sin horno todo el mundo se asegura el éxito. El único problema podría llegar en el momento de montar la nata, que tiene que estar muy fría y que no podemos pasarnos de batido porque se podría convertir en mantequilla.
Para esta receta se ha utilizado un molde de 24 centímetros, pero se podría hacer perfectamente en tamaño grande si se desea ampliando las cantidades proporcionalmente. Sobre el azúcar, lo mejor es ir equilibrando al gusto de cada uno para que no esté demasiado subida. Hay que contar siempre con que la parte superior de mermelada le aportará ya dulzor al conjunto.
El resultado, para que nos lo imaginemos, será como una mousse de queso sobre una base crujiente de galleta. Nada que ver ni con la textura de la tarta de queso al horno ni con la textura esponjosa de la tarta de queso japonesa, quizás más parecida a la tarta de queso y naranja sin horno.
Por encima, igual que se ha elegido el melocotón ahora en temporada de verano, se podría optar por las fresas, por los arándanos, por hacer una mermelada de kiwi, de mango o de lo que cada uno quiera.
Receta de tarta de melocotón y queso
Ingredientes
Para la base
- Galletas tostadas integrales, 150 g
- Mantequilla, 80 g
- Sal, una pizca
Para la crema de queso
- Nata para montar muy fría, 200 ml
- Crema de queso untable, 300 g
- Nata fresca o crema agria, 60 g
- Azúcar, 80 g
- Zumo de limón, 1 cucharada
Para el melocotón
- Melocotón, 2 ud
- Mermelada de melocotón, 4 cucharadas
- Ralladura de lima, al gusto
Paso 1
Preparar la base de la tarta
Paso 2
Hacer la crema de queso y rellenar la tarta
Paso 3
Preparar las frutas
Paso 4
Desmoldar la tarta y terminar con la fruta
Paso 1
Triturar las galletas hasta conseguir un polvo muy fino. Derretir la mantequilla en el microondas y mezclar las dos cosas.
Paso 2
Poner en la base del molde un papel de horno y untar los bordes con mantequilla. Disponer la galleta en el fondo del molde y aplastar con la parte de atrás de una cuchara hasta hacer una base uniforme y compacta. Subir los bordes ligeramente, al gusto de cada uno. Llevar al congelador por lo menos 40 minutos o hasta que esté bien firme.
Paso 3
Montar la nata muy fría con la ayuda de unas varillas. Se puede agregar una cucharada de azúcar glass para que quede más firme todavía. Hay que tener cuidado y no pasarse de batir porque se convertiría en mantequilla. Reservar en la nevera.
Paso 4
En otro bol, o en un robot batidor, batir la crema de queso con la nata fresca o crema agria, zumo de limón y con el azúcar. Batir a velocidad alta hasta que quede muy cremoso. Por último, agregar la nata montada y mezclar con la ayuda de una espátula con movimientos envolventes.
Paso 5
Verter la mezcla de queso al molde sobre la base ya congelada, extender muy bien con la ayuda de la espátula y dar unos golpes sobre la mesa para que quede todo uniforme. Volver a llevar al congelador durante 6 horas aproximadamente o hasta que esté muy firme.
Paso 6
Pelar los melocotones, quitar el hueso y picarlos en cuadraditos. Mezclar con la mermelada y añadir la ralladura de lima al gusto.
Paso 7
Desmoldar la tarta, quitar el papel de horno y poner en un plato. Cubrir con la mezcla del melocotón y dejar en la nevera para que la tarta termine de descongelarse poco a poco.