Este año en Cocinillas nos hemos propuesto que no tengáis que darle muchas vueltas a la cabeza para elegir el menú de Navidad y poco a poco os iremos presentando unas sugerencias que intentaremos que se adapten lo máximo posible a todos vosotros. Así que igual que ayer os presentamos un Menú de Navidad fácil y rápido para los que tenéis poco tiempo (o pocas ganas) de cocinar, hoy le toca el turno a los que intentáis no descuidar la dieta y optáis por alimentaros de manera saludable todos los días del año.
Y es que se puede organizar un menú de Navidad o un menú de fiesta en general sin necesidad de platos grasientos ni bombas de colesterol y triglicéridos. E incluso dejando aparte temas de dieta, puede ser interesante optar por un menú compuesto por platos ligeros y equilibrados que nos permitan disfrutar de una larga noche en compañía de nuestros seres queridos sin que nuestro aparato digestivo nos proteste.
Como tampoco es bueno pasarse de cantidad, si estamos pensando en el menú para una cena, con dos o tres entrantes para picotear, un plato principal y un postre tendremos suficiente para no quedarnos con hambre y tener una buena digestión.
¿Queréis ver lo que hemos elegido?
Entrantes para un Menú de Navidad saludable
Las patatas fritas en microondas y los frutos secos especiados son un snack perfecto como picoteo que podremos ofrecer para que los primeros invitados en llegar vayan picoteando algo. El resto de propuestas, salvo la ensalada thai son muy agradecidas porque pueden prepararse con antelación.
Platos principales para un Menú de Navidad saludable
Si no se dispone de mucho tiempo para cocinar, el conejo guisado con alcachofas es una buena opción pues está mucho más rico si se cocina el día anterior. Si optáis por dos platos principales, una buena elección será el timbal de ensalada templada de bacalao y verduras y uno de los platos de conejo o el pollo.
Postres para un Menú de Navidad saludable
Saludable sí, pero sin postre, ¡no!. Así que vamos a optar por algo a base de frutas o, si preferimos algo más elaborado, al menos que no esté cargado de azúcares refinados ni de grasas chungas, como por ejemplo la tarta de queso con calabaza y zanahoria o las galletas de mantequilla casera de aceite de oliva virgen extra.
Y ahora contadnos, ¿os apuntáis a un menú saludable para una cena de Navidad?