Cualquiera que haya desayunado alguna vez en un buffet sabe lo fácil que se te puede ir de las manos “la comida más importante del día”. Para cuando te quieres dar cuenta lo que se supone debe de ser una comida variada y equilibrada puede acabar siendo una fiesta de azúcar y grasas saturadas.

Ingredientes

  • 1 plátano
  • 30 g de arándanos
  • 100 ml de leche (puedes usar la que más te guste, incluso bebidas vegetales).
  • 2 cucharadas de semillas de chía.
  • 3 cucharadas de muesli.
  • 1 onza de chocolate blanco.
  • 2 rodajas de kiwi.
  • 20 g de piña.

En casa es algo más difícil, sobre todo si no compras nada de bollería industrial, pero eso no quita que los desayunos sean mucho más equilibrados. Especialmente si tienes que empezar a sacar aparatos para tostar el pan o hacerte el zumo.

Por eso, si buscas un desayuno fácil de preparar, que esté delicioso y además aporte todo tipo de vitaminas y nutrientes lo mejor es que aprendas a preparar un smoothie bowl. Un bol de desayuno repleto de frutas y cereales que no sólo está de rechupete, sino que además es perfecto para llevártelo a la cama.

Para preparar un smoothie bowl vas a necesitar:

Cómo preparar un Smoothie Bowl de rechupete

A la hora de preparar un smoothie bowl lo ideal, como su propio nombre indica, es usar un bol de desayuno. Aunque si no tienes ninguno a mano también puedes usar una taza grande e incluso un plato sopero. Todo sea por disfrutar este pequeño manjar.

1. Batimos el plátano y los arándanos con algo de leche

Foto: Asier G. Morato / Cocinillas

Para preparar un smoothie bowl lo primero que tenemos que hacer es meter al congelador un plátano pelado y troceado con unos cuántos arándanos. También se puede preparar con la fruta fresca pero de esta forma queda mucho más cremoso.

Después de unas cuantas horas en el congelador, sólo nos queda meter el plátano y los arándanos en la batidora y añadir la leche. Con todo dentro ya sólo queda batir hasta que quede un smoothie bien cremoso.

2. Vertemos el smoothie en un bol y añadimos los toppings

Foto: Asier G. Morato / Cocinillas

Por último ya sólo queda decorar el bol de desayuno con unas pocas semillas de chía, algo de chocolate rallado, un par de rodajas de kiwi y un trozo de piña picado en dados pequeñitos.

Improvisa y hazlo a tu gusto

Foto: Asier G. Morato / Cocinillas

Si os fijáis, para preparar un smoothie bowl hay que tener en cuenta tres partes:

  1. El smoothie. Es la base del bol de desayuno. En esta receta lo hemos preparado con plátano, arándanos y leche pero se puede hacer con cualquier combinación de frutas y verduras que se te ocurra. También puedes añadirle semillas.
  2. La base. Es totalmente opcional. Yo he usado muesli pero puedes usar desde cereales como la avena hasta frutos secos o granola. La idea es aportar carbohidratos de absorción lenta que sacien y den energía durante horas.
  3. Los toppings. Aquí es donde se nos puede ir la mano y acabar un un bol nada sano ni equilibrado. Mi recomendación es escoger un par de frutas, picarlas y acompañarlas de alguna semilla, frutos secos o pasas. También puedes añadir un poco de dulce rayando algún chocolate, por ejemplo.

Las primeras veces es muy fácil venirse arriba en cualquiera de las tres partes, pero has de tener en cuenta que no sólo tienen que combinar los sabores el resultado también tiene que ser sano y equilibrado.

Entre las frutas, los cereales, las semillas y la leche el smoothie bowl es uno de los desayunos más completos que te puedes preparar en unos pocos minutos. ¡Pruébalo este fin de semana y cuéntanos qué tal en los comentarios!