La sopa de fideos es un clásico de los inviernos, da igual que sea de pollo o si es la sopa del cocido. Un caldo sabroso y unos fideos nos curan la vida en los días más frescos. Es una receta que puede hacerse rápido si tenemos un caldo casero en la nevera o en el congelador listo para usar siempre que se necesite, pues solo tendremos que calentarlo y cocer los fideos. Pero tampoco es complicado hacerla desde cero como esta sopa de pollo con fideos que os vamos a enseñar hoy.

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La parte de hacer el caldo es sencilla, el truco de que si se asan o se tuestan los ingredientes antes, el caldo -y, por lo tanto, la sopa- tiene mucho más sabor ya se lo sabe casi todo el mundo y, si tú aún no lo sabes, no te preocupes que te lo cuento más abajo. El único y pequeño problema que surge cuando se cocina una sopa de fideos es calcular cuántos fideos hay que echar para no sean demasiados y nos quedemos sin caldo y nos tengamos que comer una fideuá extraña, ni tan pocos que se nos pierdan en el caldo.

Si le preguntamos a una abuela experimentada en la cocina, que lleva toda la vida echando los fideos a ojo -¡y acertando!-, seguramente nos diga algo así como "échale un buen puñado por persona". Pero vamos a ver, un buen puñado ¿de quién?, ¿de Anna Castillo o de Jason Momoa? ¿en qué cantidad de caldo? No sé a vosotros, pero a mí eso de medir los ingredientes clave de un plato en puñados me desconcierta mucho.

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A modo de orientación, lo normal para una sopa ni muy clara ni muy espesa es utilizar 100 g de fideos por cada litro de líquido. De ahí nos saldrán entre 3 o 4 raciones de sopa, dependiendo de si son para adultos o para niños. Algunos paquetes de fideos ya tienen unas marcas impresas que indican las raciones, pero si no es así, siempre se puede utilizar el paquete como referencia. Los paquetes de fideos suelen pesar 500 g, excepto los de una conocida marca que ahora con la reduflación pesan 450 g, y serán suficientes para 5 litros de caldo. Si, por ejemplo, vamos a hacer 2 litros de sopa, echaremos 2/5 del paquete, es decir, algo menos de la mitad.

Ahora bien, si hacemos mucho caldo con el fin de tener sopa para varios días, es mejor dividir el caldo y añadir los fideos solo en las raciones que se vayan a consumir, pues se cuecen enseguida y así evitamos que la pasta se cueza en exceso y nos la encontremos hecha papilla al día siguiente.

Paso 1

Pelamos los puerros y una zanahoria, reservamos la parte blanca de los puerros, cortamos el resto grosso modo y los ponemos en una bandeja de horno junto con las piezas de pollo. Salamos todo ligeramente y llevamos al horno precalentado a 200 ºC durante unos 35-40 minutos hasta que esté todo bien dorado. Esto también podríamos hacerlo en una freidora de aire si tenemos una que sea lo suficientemente grande.

Paso 2

En una olla ponemos a cocer el pollo con las hortalizas tostadas en unos dos litros de agua con sal al gusto y el apio. Cocinamos a fuego fuerte hasta que rompa a hervir, retiramos la espuma que se forme en la superficie, bajamos el fuego y dejamos cocinar al mínimo durante 60 minutos con la olla tapada.

Paso 3

Mientras tanto, pelamos la otra zanahoria. Pasados los 60 primeros minutos de cocción, la echamos en la olla junto con la parte blanca de los puerros que habíamos reservado y cocemos durante otra media hora con la olla entreabierta para que se reduzca un poco el caldo y se concentre más el sabor.

Paso 4

Sacamos el pollo.lo deshuesamos y desmenuzamos la carne. Sacamos también las verduras que hemos añadido al final y las picamos finamente. Colamos el caldo y lo dejamos reposar unos minutos para que la grasa suba a la superficie y la podamos retirar fácilmente mismo con una cuchara y un poco de cuidado. 

Paso 5

Retiramos la capa superior de grasa que se pueda haber formado en el caldo, lo devolvemos a la olla, lo calentamos y volvemos a retirar la espuma. Añadimos las verduras cocidas que hemos troceado, junto con el pollo desmenuzado y los fideos. Dejamos cocer los fideos el tiempo que indique el fabricante con la olla destapada.

Paso 6

Cuando estén cocidos los fideos, servimos la sopa caliente con un poco de perejil fresco picado por encima.