Cómo elegir una campana de cocina puede ser una tarea complicada. Hablamos de uno de los electrodomésticos imprescindibles en nuestra casa. Sin ella la cocina acabaría muchos días inundada por el vapor de las cocciones, la grasa que queda suspendida en el aire mientras cocinamos y el humo de la comida, por no hablar de la gran amalgama de olores que podríamos aspirar.
A simple vista todas parecen cumplir las mismas características y diferenciarse solo en tamaño y estética pero en realidad no es así y cada cocina y cada hogar necesita un extractor diferente.
Cómo elegir una campana de cocina
La primera idea que podemos pensar cuando nos planteamos qué campana de cocina comprar se resume en "una que extraiga bien los humos". Pero detrás de esa correcta extracción de humos hay muchísimos detalles y muy importantes a tener en cuenta. Parándonos en todos ellos con detalle conseguiremos comprar una campana de cocina que cubra todo lo que necesitamos.
- Tamaño de los fuegos: Toma medidas de tu placa de cocina. Lo recomendable es que la campana extractora sea al menos igual de ancha que la placa y si tiene algunos centímetros más, mucho mejor. En cuando a la distancia que debe guardar la campana de la placa, es de 70 centímetros y 75 centímetros si se trata de una cocina de gas.
- Tamaño de la cocina: ¿Tu cocina es abierta al salón o cerrada? ¡Cuántos metros tiene? Importante saberlo para conocer después la potencia que necesitarás para que ningún olor llegue a donde no debe.
- Motor: En este caso no hablamos de la potencia del motor sino de cómo está dentro de la campana. Lo mejor es optar por un motor blindado de modo que no entre grasa ni polvo en su interior, ahorrándonos así costosas reparaciones. Hay motores blindados de hierro y de plástico. Aunque los primeros son más caros, también son más resistentes y recomendables.
- Nivel de extracción: El nivel más común es de 500 m3/h.
- Extracción de humos: No confundir con el nivel o capacidad de extracción, ya que aquí nos referimos a cómo se produce esa extracción. la mayoría de las casas cuentan con una salida de humos pero en caso de que tu cocina no tenga, hay campanas con filtros especiales para ello.
- Potencia:
- Consumo: Se trata de un electrodoméstico que consume muy poco, aunque depende de la potencia. Por lo general, una campana al mínimo gasta 70 w/h y al máximo 200 w/h.
- Ruido: Un extractor va a hacer ruido pero podemos asegurarnos de que sea el menos posible. ¿Cómo? Vigilando los decibelios. Lo más adecuado es que no pase de 60 - 70 decibelios a máxima potencia.
- Materiales: La gran mayoría son de acero inoxidable o de aluminio. Ambos, materiales modernos que se limpian fácilmente.
- Situación: Dónde vamos a colocar la campana es una pregunta clave. Junto a los fuegos, correcto, pero hay muchas posibilidades.
- Funciones: Diferentes potencias de extracción y luz son las funciones básicas que todo extractor debe incluir pero hay modelos actualmente muy completos que cuentan con funciones capaces de controlar el nivel de extracción en función del humo o vapor que detectan, de apagarse cuando han aspirado todo el humo e incluso de encenderse al detectarlo.
Tipos de campana de cocina según su funcionamiento
Los extractores cuentan con diferentes variedades según cómo funcionan. Hay dos tipos, de recirculación y de extracción.
Campanas de extracción
Este tipo de campanas llevan al exterior los vapores, humos y olores gracias a un tubo que conecta la campana con la fachada más cercana de la casa. Cuanto más cerca de esa salida de humos situemos la campana, mejor porque el motor necesitará menos potencia para aspirar y llevar hasta la salida el humo.
Estas campanas de extracción cuentan con filtros de grasa, las mallas metálicas que vemos al asomarnos bajo la campana. Podemos retirarlos fácilmente para lavarlos a mano y, en muchos casos, incluso en el lavavajillas.
También deben contar con una válvula antirretorno que no deje que los olores y humos vuelvan a la cocina una vez apagamos la campana.
Campana de cocina de recirculación
Cuando no disponemos de una salida de humos o bien queremos situar la cocina y el extractor en una zona alejada de ella, de forma que el tubo sería muy largo, podemos optar por las campanas de recirculación.
Estas campanas cuentan con filtros antigrasa y también filtros de carbón que atrapan los olores, grasas, vapores y humos, limpiando así el aire y devolviéndolo de nuevo a la cocina. En el caso de los filtros de carbón, es necesario cambiarlos cada 4 meses si damos mucho uso a la campana, pudiendo dilatar este tiempo a 6 meses si no cocinamos frecuentemente alimentos fritos, etc.
Son muy fáciles de colocar, ya que se pueden ubicar en cualquier punto de la cocina y no hay que conectarlas con el tubo extractor ni realizar la salida de humos.
Tipos de extractor de humos según su instalación
El modo en el que se instalan las campanas de cocina también nos permite hablar de otros tipos.
Campanas extractoras encastradas o de pared
Son el modelo más común y consiste en una campana encastrada bajo un armario de cocina alto o bien ubicadas entre ellos, pegada a la pared. De acero inoxidable, de aluminio o lacadas, se limpian con facilidad y hay muchas gamas, desde las más sencillas con luz y diferentes niveles de extracción, hasta otras con más funciones.
Campanas en isla para la cocina
Si tenemos una cocina con isla o península será una de las mejores opciones, además de ser moderna, bonita y funcional. Las campanas en isla se instalan en el techo directamente, sobre la placa, y normalmente no van conectadas al tubo de salida de humos.
Su instalación es cara y la propia campana también lo es. Suele funcionar con filtros de carbón, por lo que también la necesidad de reponerlos con frecuencia eleva el precio.
Campana de cocina extraplana o telescópica
En parte son campanas encastradas también porque suelen encontrarse bajo los armarios superiores de la cocina pero en este caso se encienden directamente cuando sacamos su frontal hacia el exterior. Cuando la campana extraplana está cerrada, permanece apagada. Son una opción con buenos resultados, aunque suelen ofrecer solo las funciones básicas: extracción y luz.
Extractor replegable para la cocina
Otra tendencia muy novedosa y estética, aunque cara, son las campanas extractoras replegables. Cuando están apagadas no se ven. Pueden estar integradas en los armarios bajos, en la encimera, en la pared y con tirar de ellas hacia el exterior aparecen como de la nada. En su caso, extraen el humo y los olores en horizontal y no en vertical y suelen estar más cerca de los fuegos. Son más caras y su instalación eleva su precio.
¿Cómo calculo el caudal de aspiración que necesito?
El tamaño de tu cocina y si es cerrada o abierta, tipo cocina americana, afecta a la decisión de compra porque necesitarás potencias diferentes en cada caso.
Para saber con certeza la potencia que necesita tener tu campana extractora, debes multiplicar los metros cuadrados que mide tu cocina por los metros de alto. La cifra que obtengas debes multiplicarla por 12.
Ese 12 son las renovaciones completas de aire que han de realizarse en una hora, y el resultado te dará los metros cúbicos por hora de aspiración (m3/h) que debe extraer el motor. Busca un modelo que se ajuste a ellos e incluso que los supere y habrás acertado de lleno con tu compra.
Una vez hayas decidido con qué campana de cocina te quedas y lo tengas instalado en casa, debes saber algunos consejos para optimizar su funcionamiento:
- Lo mejor es cerrar puertas y ventanas de la cocina, siempre que sea una cocina cerrada.
- Hay que encenderlo según comencemos a cocinar, incluso antes si vamos a hacer fritos o alimentos que huelan mucho.
- Una vez hayamos terminado nuestra receta, dejarlo funcionando unos minutos más para que extraiga bien todos los humos y olores.
- Limpia los filtros antigrasa regularmente, sin esperar a que la grasa se acumule en ellos. En caso de que sean de carbón, respeta los tiempos para cambiarlos que marque el fabricante.
Si has elegido correctamente tu nueva campana de cocina y la usas correctamente, no importará lo que cocines porque ella siempre extraerá los humos, etc. sin problemas durante años y años.