Las patatas bravas son un clásico español. Un plato tradicional de la gastronomía de nuestro país muy popular en bares y restaurantes de todo el país. Tal es el caso que cada restaurante y cada lugar ha hecho su propia versión de las patatas bravas, a cada cuál más deliciosa. 

En el caso de Zaragoza, llama la atención saber que tienen un festival que se celebra en febrero que está centrado en las patatas bravas y que, recientemente, ha proclamado a un restaurante de la ciudad maña como aquel que hace las mejores patatas bravas de la zona.

Las mejores patatas bravas de Zaragoza

La receta de patatas bravas es un plato tradicional español que consiste en patatas cortadas en dados, previamente fritas hasta que estén doradas y crujientes, acompañadas de una salsa picante. Aunque la receta puede variar ligeramente según la región o el establecimiento, los ingredientes básicos y el método de preparación son bastante consistentes.

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La salsa brava varía en su preparación dependiendo del lugar y del gusto personal, pero suele contener ingredientes como tomate, ajo, pimentón, aceite de oliva, vinagre y a veces especias adicionales. La textura de la salsa puede variar desde una consistencia más líquida hasta una más espesa, según las preferencias del cocinero o del establecimiento.

Las patatas bravas nacieron en Madrid, en los años 60 del siglo pasado. En cualquier caso, su origen es un poco difuso y no se conoce con exactitud quién creó esta receta. Algunos se lo atribuyen a Casa Pellico, mientras que otros cuentan que está ligado a La Casona. 

En el caso de la ciudad de Zaragoza, ¿dónde se comen las mejores patatas bravas? Cabe destacar que esta ciudad ha celebrado durante todo el mes de febrero el primer concurso de esta popular ración: Zaragoza Brava.

El resultado: el restaurante Orígenes, que hace tan solo unos meses abrió sus puertas junto al hotel Boston de la mano del chef José Miguel Giménez Arias, se ha coronado como aquel que hace la mejor versión. 

Giménez, chef y propietario del Restaurante Orígenes, tras la entrega de los premios cuenta que: "Sabíamos que nuestras patatas gustaban mucho, porque así nos lo transmiten nuestros clientes, pero, tras ver el alto nivel de nuestros contrincantes, que han presentado propuestas tan diferentes e innovadoras, en un plato tan sencillo como es la patata brava, aún nos hace más ilusión haber ganado el ganado el premio".

El cocinero explica también lo siguiente: "Conseguir una patata crujiente por fuera y cremosa por dentro y acompañarla con una salsa no demasiado picante, elaborada con tomate natural, que aligera el conjunto".

En este restaurante se puede disfrutar de las patatas bravas tanto en barra como entrantes de la carta. Según se consulta en la carta del propio restaurante en su página web su plato se llama "Bravas Orígenes" por un precio de 6,5 euros.

Ingredientes y pasos para hacer unas patatas bravas

Como sabemos la receta de patatas bravas es diferente en cada lugar, de ahí que existan concursos especializados en este plato. Sin embargo, aunque la receta puede variar ligeramente según la región o el establecimiento, los ingredientes básicos y el método de preparación son bastante consistentes. Aquí tienes una receta típica de patatas bravas:

Ingredientes:

• Patatas (aproximadamente 4 patatas medianas
• Aceite de oliva para freír
• Sal

Para la salsa brava:

• 2 tomates maduros
• 2 dientes de ajo
• 1 cucharadita de pimentón dulce
• 1/2 cucharadita de pimentón picante (opcional, según el nivel de picante deseado)
• 1 cucharada de vinagre de vino
• Sal al gusto
• Aceite de oliva

Pasos para la elaboración

1. Pelar las patatas y cortarlas en dados de aproximadamente 2 cm de grosor.
2. Calentar abundante aceite de oliva en una sartén a fuego medio-alto. Freír las patatas hasta que estén doradas y crujientes. Retirarlas del aceite y escurrirlas sobre papel absorbente. Espolvorear con sal al gusto.
3. Mientras las patatas se fríen, preparar la salsa brava. Para ello, pelar los tomates y cortarlos en trozos. Pelar los dientes de ajo.
4. En una sartén aparte, calentar un poco de aceite de oliva y añadir los tomates y los dientes de ajo. Cocinar a fuego medio durante unos minutos hasta que los tomates se ablanden.
5. Retirar los tomates y los ajos del fuego y colocarlos en una licuadora o procesador de alimentos. Añadir el pimentón dulce, el pimentón picante (si se desea), el vinagre de vino y sal al gusto. Triturar hasta obtener una salsa suave y homogénea.
6. Si la salsa está demasiado espesa, se puede añadir un poco de agua para obtener la consistencia deseada.
7. Servir las patatas bravas en un plato y acompañarlas con la salsa brava por encima. ¡Listo para disfrutar!