La moda de los zumos, smoothies y batidos healthy ha venido a España para quedarse, y por ello hay quien decide comprarse una licuadora. Los primeros días después de su compra, salen unos zumos de rechupete, incluso utilizamos ingredientes que nunca antes habíamos bebido como espinacas o apio…
El problema viene después, cuando te das cuenta de que tu licuadora parece un juego de lego, y que cada una de las piezas que la componen está más sucia que la anterior. Es ahí cuando nos echamos las manos a la cabeza y decimos: "maldita la hora en la que me compré una licuadora".
Pero, no sufras si no es necesario. Hoy, venimos a contarte cómo limpiar una licuadora en pocos minutos. Trucos fáciles y rápidos con los que no habrá excusa para preparar auténticos manjares líquidos. ¡Toma nota!
Lo que debes tener en cuenta antes de limpiar una licuadora
Tu licuadora se compone de varias partes, y por tanto deberás desmontarla por completo para ponerte manos a la obra. Además, te recordamos que no deberías sumergir en líquido la pieza dónde se encuentra el motor, ni meterla en el lavavajillas. Por supuesto, también es recomendable desenchufar y apagar la máquina cuando vayamos a limpiarla.
Cómo limpiar el filtro de la licuadora
El mejor aliado para limpiar la licuadora sin duda es el cepillo. El filtro es muy complicado de limpiar, ya que tiene pequeños huecos donde es imposible acceder fácilmente. Por este motivo, frotar con un cepillo te ayudará a eliminar los restos de frutas y verduras adheridos a esta superficie tan peculiar.
Ahora bien, en ocasiones, el filtro toma ligeramente el color de la fruta o la verdura que usamos para hacer el zumo. Es el caso de remolacha, zanahoria, y otros alimentos que contienen pigmentos de color. Para eliminar esta acumulación de color en esta zona es recomendable aplicar varias gotas de aceite vegetal.
Cómo limpiar el motor de la licuadora
El motor debe ser protegido al máximo, puesto que de mojarse podría estropearse la máquina entera. Es por eso que recomendamos su limpieza con un paño ligeramente humedecido. Puedes añadir unas gotas de lavavajillas, pero sin pasarte de cantidad, puesto que, de penetrar este producto en el motor, también podrían existir consecuencias.
En ningún caso se te debe ocurrir introducir esta pieza en el lavavajillas, o dejarlo en remojo. Si tiene mucha suciedad puedes probar con un quitagrasas que no sea muy agresivo, pero retirándolo inmediatamente. Del mantenimiento de esta pieza depende, en mayor medida, la vida útil de tu licuadora.
Cómo limpiar el vaso de la licuadora
Ahora llega la parte que más se ensucia de toda la licuadora: el vaso. En este caso, puedes meterlo en el lavavajillas y olvidarte, ya que este sale reluciente. Pero, debes tener en cuenta que hay algunos materiales que no toleran el calor que se acumula en los lavavajillas, y a la larga, podría echar a perder tu licuadora, sobre todo si hablamos de materiales plásticos.
Así que, lo mejor es que laves tu vaso de manera manual. Te recomendamos que eches agua tibia en la licuadora y añadas dos o tres gotas de tu jabón para vajillas habitual. Refriega con un estropajo suave, y de esta manera prolongarás su vida útil al máximo.
Los mejores trucos para limpiar tu licuadora
Ahora bien, queremos que te cueste lo mínimo posible limpiar tu licuadora, por eso vamos a darte más consejos para limpiar tu licuadora. Aplícalos todos y verás como ahorrarás tiempo en tu limpieza:
- Siempre agua caliente o tibia en su defecto.
- Emplea jabón común, nada de quitagrasas agresivos.
- Frota con una esponja limpia bien enjuagada.
- Seca bien todas las piezas antes de volver a montar la licuadora.
- Atomiza todas las partes con agua oxigenada al menos una vez por semana (si la usas a diario).
- Presta una atención especial a las juntas que es donde más suciedad se almacena.
- Lava sobre todo la parte de la rosca del vaso, y no te olvides de lavarlo también por fuera.
- Si la tapa tiene orificio, no te olvides de él. También podría contener restos.
- Cuando hay mucha suciedad en el vaso, puedes probar licuar medio limón y un poco de bicarbonato.
- Deja todas las partes aireándose antes de volver a montar la licuadora.
Escoge bien tu licuadora para ahorrar tiempo en su limpieza
Ni que decir tiene que la limpieza de una licuadora debe hacerse inmediatamente después de cada uso. Esto impedirá que puedan secarse los restos de alimentos, y que te sea más complicada su limpieza.
Ahora bien, si aún no tienes licuadora y te preocupa el tema de la limpieza antes de comprarla, tenemos que decirte que estás a tiempo de adquirir un modelo fácil de limpiar. Existen en el mercado modelos muy compactos y de vasos anchos, que conseguirán que pierdas menos tiempo en el momento de limpieza.
Si que es cierto que estos modelos suelen tener un coste más elevado que las licuadoras convencionales que cuentan con muchas piezas, pero ¿no merecerá la pena? Por otra parte, también es recomendable que adquieras una licuadora cuyas piezas sean aptas para el lavavajillas. No para introducirlas siempre en el lavavajillas, sino para introducirlas de vez en cuando para garantizar una limpieza óptima.
No obstante, por mucho que te cueste limpiar tu licuadora, siempre merece la pena cuando saboreas esos zumos caseros que tan bien te salen, ¿no crees?