La cuarta semana de embarazo, se caracteriza por la ausencia de menstruación. El embarazo empieza a contarse desde el primer día de la última regla que ha tenido lugar. Todavía faltan 8 meses de gestación.
Qué se siente en la semana 4 de embarazo
En las primeras semanas del embarazo no se suele sentir gran cosa. Hay mujeres que tienen sensaciones muy similares a las de la ovulación o la menstruación, pero lo habitual es que ni te enteres. En la cuarta semana de embarazo lo normal sería tener pequeños mareos, nauseas matutinas y puede que notes los olores más intensos y a veces resultan desagradables.
Tengo que explicarte algo, para que no te alarmes en el caso de que te pase a ti. El 25% de las mujeres embarazadas sufre hemorragias en el primer trimestre, esto no quiere decir que vayas a perder al bebé, en muchos casos es totalmente normal, pero al primer indicio debes acudir a los médicos, que valoren la situación ya que, por desgracia, los sangrados constantes también son un síntoma de aborto espontáneo.
Qué síntomas son propios de esta etapa de embarazo
En esta etapa, los primeros síntomas son más intensos, la implantación ya ha tenido lugar y nos ha dejado unas molestias debido a ello.
Los síntomas son similares a los previos de nuestra menstruación, pero por lo general nos encontraremos con, retención de líquidos, dolor en el bajo vientre o en la zona pélvica, que pueden derivarse en pinchazos, aumento de presión en los senos, mareos, ganas continuas de orinar, cambios de humor como si tuviéramos bipolaridad, dolores de cabeza y en algunos casos, siendo estos mínimos, las mujeres experimentan episodios aislados de subida de leche.
Y por supuesto las dichosas nauseas que a menudo se convierten en vómitos y no precisamente van a ser solo por las mañanas. Además, el flujo vaginal va a ser más espeso, transparente y fluido, mucho más abundante que el que recordamos antes de tener el periodo o después.
Cambios en tu bebé esta semana
En el embarazo, semanas 3 y 4 pueden hacernos un lío, cuando estamos hablamos de la actividad interna. Pero lo cierto es que cada mujer es diferente y los cambios en el cuerpo propios de la cuarta semana pueden producirse antes o después de esta. Pero por lo general, el embrión en este momento tiene aproximadamente dos semanas, aún debemos llamarlo blastocisto, ya que no es más que, varias células unidas en forma de disco.
Estas células de las que hablo, se organizan por capas que tienen a su vez, objetivos distintos. Un grupo trabaja para dar lugar a los tejidos y órganos, otro se encarga de generar todo lo necesario para la alimentación del feto en la placenta, por otro el líquido amniótico y las membranas, para que se encuentre en todo momento protegido. Esto es posible, porque la mayoría de estas células, son células madre que como ya sabemos, gracias a su versatilidad, se dividen fácilmente para crear más células y construir cualquier elemento del cuerpo de nuestro bebé.
Todo lo que os he contado sobre los cambios, puede ser explicado de manera más científica. En esta cuarta semana se crea el disco trilaminar que da lugar al ectodermo, este se encarga del sistema nervioso central, el endodermo, encargado de crear el tracto gastrointestinal, hígado, glándula tiroides y páncreas y el mesodermo que dará lugar al sistema sanguíneo, los músculos y huesos.
Qué comer en la cuarta semana de embarazo
Como ya sabemos, la alimentación no solo es importante durante las semanas que dura el embarazo, es que es necesario consumir los alimentos adecuados incluso en la lactancia, para no transmitir ningún mal a nuestro pequeño.
Ya deberíamos haber eliminado de nuestra rutina diaria el alcohol, tabaco y por supuesto todo estupefaciente que perjudique el buen desarrollo del feto. El café también es recomendable eliminarlo de nuestro día a día, será difícil si eres una caféadicta, pero tendrás que hacer ese esfuerzo.
Lo mejor que puedes hacer en este momento es, pedir cita con tu ginecólogo o tu médico de cabecera para que ellos te orienten en la alimentación y consumo de suplementos y vitaminas como ácido fólico que mejoren tu estado. No obstante, como va a ser una semana difícil y te levantarás con ganas de vomitar la mayoría de los días, te recomiendo evitar que tengas el estómago vacío. No se trata de llevar a rajatabla, eso de comer por dos, come lo normal, pero hazlo de poco en poco para evitar que tu estómago se vacíe y que sufras más a la hora del vómito.
Recomendaciones de la cuarta semana
Tu bebé ahora mismo es como una pequeña lenteja, el pequeño mide sólo 4 milímetros de diámetro y por lo tanto si te realizas una ecografía lo que verás será algo muy pequeño sin distinciones. En 4 semanas de embarazo, las ecografías mostrarán una pequeña esfera de líquido con los bordes marcados, situada en el endometrio, pero este no es el embrión, si no que se trata del saco gestacional que lo contiene.