En España el polvo de raíz de cúrcuma es poco conocido, aunque últimamente comienza a difundirse como aditamento para distintos platos de fusión de cocinas, a los cuales aporta un color y un aroma ligeramente similar al jengibre. Entre otras aplicaciones, algunos chefs de la cocina española la utilizan en las paellas como sustituto del azafrán porque su acción colorante es muy similar y además concede un aroma agradable.
Además de aromatizar los platos, este polvo amarillento que tienen en la balda de especias en muchos supermercados como Mercadona, tiene prácticamente todas las propiedades necesarias para que nuestro organismo funcione como un reloj y mantenga a raya a las enfermedades infecciosas. En este artículo vamos a contarte para qué sirve la curcuma, cuáles son sus propiedades y beneficios.
Qué es la cúrcuma
La cúrcuma es una planta medicinal, la Cúrcuma longa (perteneciente a la misma familia que el jengibre), cuya raíz tiene un característico color naranja o amarillo intenso. Esta raíz transformada en polvo, es lo que nosotros conocemos comúnmente como condimento o colorante alimentario.
Probablemente alguna vez alguien de tu círculo la haya, nombrado como azafrán de raíz, como palillo o como azufre de Indias, pero en la práctica hablamos del mismo elemento. ¿Hasta aquí no te suena de nada? ¿seguro? Entonces ponte a leer los ingredientes de un bote de curry en polvo, verás como la cúrcuma es uno de sus principales y mayoritarios.
Pero, hablemos de su origen para poneros en situación. La cúrcuma es originaria del Sureste Asiático, donde suma ya unos veinticinco siglos de uso culinario. Y si hablamos de uso medicinal, entonces podría sumar muchos más porque se la conoce por tener propiedades contra el cáncer, el colesterol alto o la artrosis entre otras enfermedades.
Propiedades y beneficios de la cúrcuma
Te hemos adelantado algunas de las propiedades medicinales más características de la cúrcuma, pero no nos acercaremos ni al 10% si lo dejáramos aquí, porque también tiene acciones antiinflamatorias, antioxidantes, antibacterianas y digestivas. ¡Vamos, un combo!
Y aquí es donde vamos a enumerarte algunos de los beneficios de la cúrcuma para el organismo. Algunos, porque como hemos dicho, la lista es larga y extensa.
- Mejora la digestión.
- Facilita en la pérdida de peso.
- Combate resfriados y gripes.
- Evita las crisis de asma.
- Desintoxica el hígado.
- Regula la flora intestinal.
- Trata problemas en el hígado.
- Estimula el sistema inmune.
- Alivia la inflamación en la piel como eccemas, acné o psoriasis.
Debido a todos estos beneficios, y muchos otros que se nos han quedado en el tintero, la cúrcuma es una buena aliada para tratamientos de enfermedades como la diabetes, el colesterol alto, las úlceras gástricas o el cáncer.
Cómo tomar la cúrcuma
Pero ahora viene otra pregunta, ¿cómo la tomamos? Porque lo de abrir el bote y espolvorear directamente sobre la boca como que no es plan… Sabemos de antemano que entonces lo correcto es introducirla en guisos o platos a modo de condimento, ¿verdad? O al menos así es como se lleva haciendo miles y miles de años. Pero, lejos de esto, existen otras formas de ingerir la cúrcuma, sobre todo si queremos que sus beneficios para la salud se intensifiquen y sean más rápidos. Por lo general, distinguimos tres formas más factibles de consumirla.
1. Cúrcuma en infusión
Solo tienes que poner cuatro tazas de agua a hervir. Añadir una cucharadita de cúrcuma molida y reducir a fuego lento durante 10 minutos. Colar el té con un tamiz fino en un vaso, agregar miel y/o limón al gusto.
Se puede experimentar con los ingredientes y aromas hasta hallar la opción que más guste, por ejemplo, se puede añadir una rodajita de jengibre para sumarle sabor y potencial terapéutico.
2. Cúrcuma en cápsulas
Hoy en día, ya existen en el mercado las cápsulas de cúrcuma que se presentan como suplementos alimentarios. En este caso sería recomendable no tomar más de un gramo por día y consulta a un profesional que pueda ayudarnos a establecer la dosis correcta.
3. Cúrcuma en gel
Ya hemos dicho que la cúrcuma es buena aliada para problemas en la piel como la psoriasis, o incluso para las quemaduras. Por ello, te recomendamos que compres una crema con cúrcuma o te la fabriques tú en casa con un poco de sábila (Aloe Vera) y polvo de cúrcuma.
Cómo se toma la cúrcuma para adelgazar
Otro de los beneficios principales y más conocidos de la cúrcuma es que ayuda al cuerpo a perder peso gracias a sus compuestos activos. La pérdida de peso por medio de la cúrcuma resulta muy natural y responsable, por eso es tan popular su uso en dietas, pero debemos tener en cuenta que no es magia, la cúrcuma sin una dieta equilibrada y unas rutinas de ejercicio marcadas no sirve para nada, así que antes de nada comienza por hacer deporte.
Ahora bien, si quieres incluir la cúrcuma en tu dieta para que esta te ayude a perder esos kilos de más puedes hacerlo de varias formas:
- Usar la cúrcuma fresca: Introdúcela en tus comidas para que ayude a tu organismo a activarse.
- Infusión de cúrcuma: La puedes hacer con cúrcuma fresca o en polvo.
- Agua de cúrcuma: Quizá esto sea lo más sencillo de elaborar en casa, tan solo tienes que preparar un vaso de agua tibia con una cucharadita de la especia y una pizca de pimienta y tomarla en la mañana o en la noche.
- Cúrcuma en cápsulas: Las cápsulas, desde luego, son el remedio más efectivo. Además, puedes comprarlas mezclados con otros elementos como el jengibre, la pimienta negra, el té verde… Todo para ayudar a que tu metabolismo se active y pierdas peso fácilmente.