No es nada nuevo en el firmamento de la NBA que todos los años los jugadores de la mejor competición profesional del mundo nos impacten con sorprendentes líos de faldas. La propia Liga da cursos a sus rookies (jugadores novatos) sobre los peligros del acoso al que se verán sometidos por señoritas sin escrúpulos a la caza del pipiolo que acaba de firmar un sustancioso contrato. Y aun así muchos de ellos caen en la trampa.
Es llamativo por poner un ejemplo que muchas franquicias impongan que los jugadores no puedan tener affaires con las animadoras del equipo. “Sólo se ven y nada más” decía el jefe de las cheerleaders de los Dallas Mavericks. E incluso algunos jugadores han dicho públicamente que se arrepienten de haber celebrado fiestas con celebrities antes de jugar partidos. Es el caso de JR Smith al que se relacionó con Rihanna cuando él jugaba en Nueva York.
Esta temporada se ha producido una vuelta de tuerca más en el fenómeno de los escándalos cuando ha trascendido que el entrenador jefe de los New York Nicks, Derek Fisher mantiene una relación con la ex mujer de un compañero con el que coincidió como jugador en Los Angeles Lakers, Matt Barnes hace unos años.
Al parecer el ahora alero de los Memphis Grizzlies donde juega Marc Gasol al enterarse condujo 150 kilómetros hasta el apartamento de ella en Los Ángeles donde viven también sus dos hijos para afearle la conducta a su ex compañero. No deja de ser curioso que al damnificado por esta historia Matt Barnes, le gustaba colgar en YouTube videos con su también ex compañera sentimental de un alto contenido sexual.
Lo novedoso del caso estriba en que la figura de los entrenadores se había mantenido al margen de este tipo de escándalos. Pero la cosa no acaba ahí ya que en Nueva York se rumorea que el propio Fisher podría haber mantenido relaciones con las mujeres de dos de los jugadores a los que entrenaba la temporada pasada. Lo nunca visto por las implicaciones no solo personales sino también profesionales que supondrían dentro del vestuario del equipo del Madison.
El entrenador del base español José Manuel Calderón que en el pasado fue también el presidente de la Asociación de Jugadores y un duro negociador para tratar los convenios salariales se ha revelado también como un infatigable latin lover con las mujeres y novias de sus antiguos compañeros y subordinados
No muy lejos de nueva York en la ciudad canadiense de Toronto el escolta Lou Williams no ha ocultado que tiene dos novias oficiales y que eso no supone un problema para él. Imaginamos que tampoco para ellas, aunque una sea la madre de sus dos hijos. No ocultan que ambas se llevan muy bien. Comentadísimas han sido sus fotos con ambas, “rubia” y “morena” como el las llama, celebrando la Nochevieja de 2014.
Las historias turbulentas de las Kardashian con jugadores NBA como Lamar Odom y Kris Humphries se han quedado en un juego de niños. ¿Con que nos sorprenderán en el futuro?