El próximo domingo 14 de febrero se celebra San Valentín. Pero en el día del amor no siempre acierta Cupido. En el tercer trimestre de 2015 se produjeron un total de 95.995 rupturas matrimoniales, según los datos del Consejo General del Poder Judicial. El grueso de las rupturas lo protagonizan los divorcios que representan el 94,7% del total. Un 5,2% son separaciones y un 0,2% nulidades. No todo son malas noticias.
El año 2006 con casi 127 mil divorcios fue el año con más rupturas de este tipo de la última década según los datos publicados en el Instituto Nacional de Estadística (INE). Esto se produce un año después de que se pusiera en marcha la Ley 15/2005, más conocida como la ley del divorcio exprés impulsada por el Gobierno de Zapatero. Con la entrada en vigor de la ley se acortaban los plazos, se eliminaba la necesidad de explicar la causa y se suprimía la necesidad de separación previa.
Justo en ese mismo año el número de separaciones empieza a caer. Esto se debe a los cambios normativos mencionados con anterioridad como, por ejemplo, el hecho de haber estado casado solo durante tres meses. Según se explica en el VII Informe sobre exclusión y desarrollo social en España de 2014 elaborado por la Fundación Foessa con este cambio normativo "la mayoría de las parejas que quieren poner fin a su matrimonio optan por el divorcio en lugar de la separación".
A esos datos hay que añadir el resto de conceptos que contempla la ley como las separaciones y las nulidades. Casi 19 mil separaciones efectuadas en ese año y 174 nulidades matrimoniales. No conocemos los datos de parejas de hecho que se han roto, ya que no existen datos estadísticos a este respecto.
En la última década el número de divorcios ha aumentado un 38% respecto a 2005. A pesar de ello, el aumento producido en el año 2006 no se ha vuelto a producir.
Como curiosidad: de los más de 100 mil divorcios que se produjeron en España en el año 2014, un 20% de ellos llevaba más de veinte años casados. Le siguen los matrimonios con una duración de entre cinco y diez años juntos. Lo mismo sucede con las separaciones. No se produce la misma tendencia con las nulidades, las cuales se suelen producir a los cinco años de matrimonio. Y la edad a la que más se rompe el amor para los casados se produce entre los 40 y los 60 años.
Que el amor está de capa caída se muestra además si atendemos a los datos de enlaces matrimoniales. Cada vez son menos los matrimonios que se producen. Éstos han caído un 23% respecto a 2005.