El flamenco y la solidaridad se dan la mano para ayudar a la Fundación Infancia Sin Fronteras. Arantxa de Benito junto a su pareja Agustín Etienne han sido los encargados de organizar este acto en el que numerosos famosos han querido aportar su grano de arena donando algunos de sus objetos personales. Un capote de Cayetano Rivera, una muletilla de Francisco, unas manoletinas de El Cordobés y un pantalón de El Juli son algunos de los objetos que se han ofrecido.
Agustín ha aprovechado la coyuntura para desmarcarse completamente del que fuera su socio, Toño Sanchís y confirmar su apoyo absoluto a Belén Esteban en la cruzada que ambos mantienen. Además de los enseres, muchas han sido las caras conocidas que se han dejado ver por el antiguo Corral de la Pacheca, un lugar emblemático para el mundo del flamenco.
Cecilia Gómez se ha encargado de poner arte a la noche, regalando a los presentes un espectáculo de danza flamenca. La bailarina se confiesa soltera y centrada únicamente en su trabajo. Además, afirma que no necesita la figura de un hombre a su lado para sentirse realizada y completa. Por su parte, Raquel Bollo quien también ha querido apoyar el acto y sobre todo a su hijo Manuel, encargado de cantar. La sevillana ha coincido con Kiko Rivera y su chica, Irene Rosales.
Tras los últimos acontecimientos marcados por relación inexistente entre Bollo y Pantoja, Rivera ha tenido unas palabras bonitas para la que considera parte de su familia. Palabras que para Raquel dicen significar mucho.Pero sin duda alguna, los más esperados de la noche han sido precisamente ellos, Kiko Rivera e Irene Rosales. Han pasado unos días en Madrid con el objetivo de relajarse juntos.
Tras las noticias de su supuesta crisis, la pareja ha querido zanjar los rumores de la mejor manera: con un beso en los labios delante de toda la prensa. Tras los rumores de la relación de conveniencia que parecían tener, Kiko Rivera niega absolutamente que su relación se base en un pacto. Además, el hijo de la tonadillera ha aprovechado para aclarar que su madre se encuentra estupendamente pero que todavía necesita tiempo para recuperarse.
Kiko Matamoros y Makoke también necesitan dar un alto a su vida pública. Matamoros confiesa que está viviendo una de las etapas más duras en televisión. Aunque sigue apoyando a su hija Laura en Gran Hermano VIP, declara que también entiende a Makoke cuando dice desear que Laura no sea la ganadora.