Con 15 años este madrileño se puso delante de una vaca y en ese instante momento tuvo claro que quería ser torero. Aprendió en la Escuela Taurina ‘Marcial Lalanda’. Su familia siempre le ha apoyado y aunque en su casa siempre hubo afición, no tiene ningún antecedente taurino. Eso ha cambiado ya que sus dos hermanos son picadores.

Ahora Iván Vicente con 36 años es un torero de estilo clásico y puro cuyo arte complementa con su belleza y físico, poco habituales en los matadores españoles. “Tengo buena genética. Aun así no hago excesos y le doy importancia a la estética”.

Este pasado lunes 2 de mayo en Las Ventas hizo realidad su sueño "es una fecha emblemática para el calendario taurino en la que quise estar desde que empecé en el toro", confiesa. A pesar de no haber obtenido un triunfo sus sensaciones fueron muy buenas e importantes.

Tanto que hasta su traje para la Goyesca estaba cargada de mensajes subliminales. "El vestido ha sido confeccionado por el sastre de toreros Justo Algaba, todo un privilegio ponerme en sus manos. Es un diseño especial, inspirado en el trabajo que hizo para el espectáculo 'Cayetana su pasión'. Se incluyeron las rosas como símbolo del amor".

Cuando se pone delante del toro piensa en disfrutar de lo que hace. Antes de salir a la plaza tiene algunas manías; “vestirme siempre por el pie derecho, salir el último de la habitación del hotel y me acompaña mi pequeña capilla con imágenes que me transmiten confianza”.

"Considero que mi trayectoria 15 años después de mi alternativa ha tenido altos y bajos sobre todo estos últimos cuatro años por falta de oportunidades en las que apenas me puse el vestido de torear, evidentemente esa inestabilidad no ayuda a posicionarte", aclara el diestro.

Para Iván sus grandes maestros son "Paco Camino, Julio Robles o Manzanares. También he disfrutado mucho del arte de maestros como Joselito o Finito, con los que me siento más identificado. No se imagina haciendo otra cosa que no sea torear:” forma parte de mi vida y hasta hoy ni me lo planteo”. Su próxima corrida el 29 de mayo en La Feria de San Isidro.