A las 11 de esta mañana, Sara Carbonero, con su hijo Lucas en brazos, y el portero Iker Casillas han abandonado la clínica madrileña Ruber, donde la periodista dio a luz el pasado jueves a su segundo hijo. La pareja, muy sonriente, ha posado para los medios que se agolpaban a las puertas del centro médico. Ella, ha salido con un look muy veraniego formado por un simple vestido hippie de rayas y unas sandalias de esparto, mientras que el atuendo del futbolista ha llamado cuanto menos la atención. Iker Casillas se ha mostrado ante las cámaras con el chándal de la Selección Española de fútbol. Cierto es que el de Móstoles se encuentra estos días concentrado por el partido que el conjunto nacional jugará mañana a las 20:45 horas en Getafe contra Georgia.
El ausente en esta foto de familia ha sido el otro pequeño de la casa, Martin, de dos años, quien seguro aguarda impaciente en casa la llegada de su nuevo hermanito. Es precisamente hacia allí, donde Sara e Iker se ha dirigido tras su salida de la clínica. Lo han hecho en el coche del futbolista, que ha conducido él mismo.
Lucas nació el pasado jueves de 2 de junio a las 202.25 horas en un parto programado por cesárea. La doctora que atendió a Sara, Elena Carrilo de Albornoz, es la misma que atendió a la periodista en su primer parto. El pequeño ya ha recibido sus primeros regalos. Uno de los que más ilusión le ha hecho a su padre es la camiseta de fútbol que le ha regalado el FC Porto al pequeño con el número 12 y su nombre. El equipo donde juega ahora Iker Casillas ha tenido este detalle con el recién nacido y ha felicitado a sus famosos padres por el alumbramiento.
La pareja reside actualmente en Oporto (Lisboa) donde Iker es portero de su equipo de fútbol. El pasado 20 de marzo se casaron en secreto en Boadilla del Monte, con el pequeño Martín como único testigo. Hace apenas 20 días, ella voló hasta Madrid para establecerse en su casa de La Finca y poner todo a punto para la llegada de este bebé. Después, todos juntos volverán al país vecino.