La familia real británica al completo compareció en el balcón del Palacio de Buckingham este sábado para presenciar el desfile de las Fuerzas Aéreas británicas en honor de la Reina. El desfile era parte del segundo día de celebraciones del 90 aniversario de Isabel II. En el balcón estaban los príncipes Carlos, sus hijos Guillermo y Enrique, todos ellos vestidos con sus condecorados uniformes, así como Felipe de Edimburgo, el marido de la Reina. Isabel II destacaba en el centro con un elegante vestido y sombreros verde pistacho. La gran atracción fue la pequeña Charlotte, la segunda hija de Catalina y Guillermo, de apenas un año, en su primera comparecencia pública. En brazos de su madre contemplaba atónita los cazas rasgando el cielo nublado de Londres y a la multitud congregada al otro lado de las vallas del palacio, sin saber qué estaba pasando.

Por la mañana la monarca fue conducida en carruaje a través de la avenida de The Mall hasta la explanada de Horse Guards Parade, al otro lado del parque real de St James’s, donde presidió el tradicional desfile del Estandarte, que se celebra desde 1748 y que tiene su origen en una ceremonia que se llevaba a cabo en el campo de batalla antes de entrar en combate. Isabel II estuvo acompañada por su esposo, que el viernes cumplió 95 años. En el carruaje de detrás se encontraban el Príncipe Enrique y las duquesas de Cornualles y de Cambridge. Les seguían en otro carruaje el tercer hijo de la Reina, el Duque de York, con sus hijas, las princesas Beatriz y Eugenia. Carlos, el príncipe heredero, que es coronel de la Guardia de Gales, la Princesa Ana, que es coronel del regimiento de los ‘Blues and Royals’, y el príncipe Guillermo, coronel del regimiento de los 'Irish Guards', acudieron montados a caballo y vestidos de militar con guerra roja y gorro negro.

En las caballerías, donde se había instalado una grada para el público, la Reina pasó revista a su guardia personal, la 'Household Division'. Desfilaron por delante de la monarca 1.600 soldados y 300 caballos en una las ceremonias más antiguas del Reino Unido. La anécdota del desfile se produjo cuando uno de los soldados, escondido bajo los calurosos gorros negros tubulares de piel de oso, cayó desplomado al suelo víctima del calor que hacía en Londres. La mañana fue calurosa en Londres. La Reina ha asistido a este desfile desde que llegó al poder en 1952, todos los años excepto 1955, cuando una huelga ferroviaria obligó a cancelar el evento.

Tras el desfile la Reina fue conducida de nuevo a Buckingham para asistir al desfile aéreo vitoreada por los cientos de miles de personas agolpadas a ambos lados de la avenida agitando banderitas británicas de plástico y fotografiándola mientras la monarca saludaba desde el carruaje. Los ciudadanos detectaban cualquier espacio desde donde poder ver pasar los caballos. Había prensa acreditada de todas partes del mundo, periodistas estadounidenses, australianos y de las dieciséis naciones de la Commonwealth de la que sigue siendo reina, que prueba la enorme popularidad de la que goza la monarquía británica y que contrasta con el mal momento de otras casas reales europeas. La recuperación de la popularidad de los Windsor se produjo a raíz del matrimonio de Guillermo y Kate Middleton en 2011 y los actos de celebración del Jubileo de Diamantes de la Reina en el 2012 para enmarcar sus 60 años en el trono.

Isabel II se convirtió en septiembre del año pasado en la monarca que más tiempo reinó en Reino Unido superando a la reina Victoria, que llevó la corona durante 63 años. Además de los desfiles por aire y por tierra también ayer hubo una procesión por el Támesis de una flotilla de navíos histórico y retumbaron cañonazos en su honor en Londres y en otras ciudades del país.

En los dos parques que circundan Buckingham Palace , en St James’s Park y en Green Park, se han instalado dos pantallas gigantes que retransmiten en directo los eventos que se celebran en honor de la Reina y que se extenderán a los largo de todo el fin de semana. Los actos empezaron el viernes con una misa de acción de gracias en la catedral de St Paul’s y proseguirán este domingo con un picnic para diez mil personas en The Mall y un desfile estilo carnaval dedicado a la Isabel II. También este sábado se publicó el listado de los ciudadanos británicos que serán investidos caballeros por la Reina por sus servicios al país, entre los que se encuentran el astronauta Tim Peake y el cantante Rod Stewart.