Íñigo Méndez de Vigo y Montojo, ministro de Cultura en funciones es el IX barón de Claret y tiene parentesco con la familia real española. Nieto y bisnieto de poetas, no es de extrañar que la poesía le haya acompañado toda su vida. Su abuela materna fue la escritora Carmen de Icaza, VIII baronesa de Claret, título que heredó él en 1980. Su bisabuelo fue el poeta y crítico mexicano Francisco Asís de Icaza y el mejor amigo de su abuelo paterno fue uno de los grandes amigos de Rubén Darío.
Durante la ofrenda floral realizada el pasado mes de febrero ante el busto erigido en su memoria en la glorieta Rubén Darío de Madrid, Méndez de Vigo no tuvo reparos en afirmar "A mí, Rubén Darío, me ha acompañado desde niño, a lo largo de mi vida. Cuando pensamos que todo se tuerce, el único bálsamo, el único consuelo a los que nos aferramos es la literatura, y dentro de ella, la poesía y ahí Darío es uno de los más grandes".
Este lunes el Ateneo de Madrid inauguró una exposición del poeta nicaragüense con motivo del centenario. En esta se muestra la estrecha relación que el poeta, periodista y diplomático nicaragüense tuvo con la institución madrileña, a través de momentos claves de la vida del artista y su relación con España, como su participación en el año 1905 en el III Centenario de la publicación de El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha celebrado en el Ateneo de Madrid o su asistencia, siete años más tarde, al homenaje al premio Nobel de Literatura, Jacinto Benavente.
La exposición cuenta con primeras ediciones de algunos de sus libros de los fondos de la Biblioteca del Ateneo y la máscara mortuoria que la Embajada de Nicaragua entregó en 1930 siendo presidente del Ateneo Gregorio Marañón y miembros de la directiva Manuel Azaña y Luis de Tapia, entre otros.
Durante el acto, el ministro estuvo acompañado por el presidente del Ateneo, César Navarro y Rosa Villacastín, nieta de Francisca Sánchez, el gran amor del poeta nicaragüese. La periodista aprovechó la ocasión para entregarle a Méndez Vigo, un ejemplar de la novela 'La princesa Paca' (Plaza y Janés), en el que se recoge la historia de amor de su abuela, una joven humilde de Navalsaúz (Ávila) que enamoró al príncipe de las letras y guardó en un baúl gran parte de su patrimonio litetario que donó al Ministerio de Cultura para su estudio y conservación. Una vida de novela cuya miniserie se encuentra en pleno rodaje y emitirá proximamente TVE.
Este homenaje forma parte de la serie de actividades con las que la sociedad española está celebrando el centenario del poeta y viene a recordar la trascendental influencia de Rubén Darío en la poesía en español del siglo XX. Las celebración culminará en diciembre con un recital poético de escritores españoles vinculados al poeta nicaragüense, entre los que estaban Ramón Pérez de Ayala, Francisco Villaespesa, Ramón María del Valle-Inclán y los hermanos Antonio y Manuel Machado, que consideraban a Darío "español de adopción".