Un estadounidense divorciado con una exmujer que se casa con un príncipe británico. Lo que podría parecer el argumento de una película es una historia completamente verídica con nombres propios: Meghan Markle (36 años) y el príncipe Harry (32). Sin embargo, hay una persona que no ha podido dejar pasar la oportunidad de convertirla en una serie de televisión y añadirle tintes aún más llamativos. Se trata de Trevor Engelson (40), productor y exmarido de la intérprete de Suits.
Pese a la intención de ficcionar la historia incorporando a un hijo en común cuya custodia ha de repartirse entre el estadounidense divorciado y la Familia Real en la que recala la protagonista, lo cierto es que las similitudes entre el argumento y el matrimonio de Markle y Engelson no ha pasado desapercibido a ojos de los medios de comunicación de Estados Unidos. Así, Deadline revela que ha sido Fox la cadena que ha comprado los derechos para emitir la serie próximamente, que contará además con la colaboración del productor de Modern Family.
Hasta el momento, Engelson se había mantenido en un segundo plano ante la incipiente relación entre el príncipe y la actriz, al contrario de la actitud que han mostrado otros familiares de Markle. Sin embargo, el productor ha preferido guardar silencio pero manifestarse de otro modo, concretamente con sus producciones televisivas.
El anuncio del proyecto de Fox ha tenido lugar justo en la misma semana en la que se producía la primera imagen pública de Harry y Meghan juntos. Ambos acudían a presenciar uno de los partidos de los juegos Invictus celebrados en Canadá, los mismos en los que ambos se conocieron hace poco más de un año.
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Más cerca del compromiso oficial
La primera fotografía de la pareja en público es sólo un detalle más que hace pensar en que el anuncio de compromiso es inminente. La actriz tiene tratamiento de princesa desde hace un tiempo en cada uno de los viajes que realiza desde su Toronto natal hasta Londres. En el aeropuerto de la capital británica la espera, a pie de pista, el propio Harry con uno de sus vehículos y acompañado de varios escoltas. Sus maletas son las últimas en ser facturadas a fin de ser recuperadas primero y elude los controles de seguridad pertinentes del aeropuerto. Además, tiene a su disposición el salón de autoridades privado que normalmente utiliza la Familia Real así como los miembros del gobierno en sus visitas oficiales.
Por si fuera poco, hace tan sólo unos días la propia Meghan rompió su silencio en una conocida revista en la que confirmaba sin tapujos que tanto ella como su pareja están "muy enamorados". Sus palabras venían a oficializar un romance que se espera que pronto se transforme en comunicado por parte del palacio de Kensington.