Desde que Pilar Eyre habló de las existencia de una hija secreta del rey Juan  Carlos (79) con Risto Mejide (43), no se  habla de otro tema en las cenas de empresa,  en las colas de la pescadería y hasta en las clínicas de fertilización in vitro. Hay quien dice que la periodista catalana dijo lo de que era una chica para despistar… Foros como cotilleando.com, o cotorreando.com, que es como llaman a esta interesantísima web las incondicionales de la reina Letizia (45) se han convertido en una quiniela.

Y es que por hablar que no quede…Que si el susodicho o la susodicha es belga, que si tiene orígenes almerienses, granadinos ,esquimales, de un país nórdico o murcianos,  que si es extranjero, que si tiene nombre de emperador, que si tiene unos ojos azules brillantes como el mar a los Christian Castro, que si la madre es periodista, sexadora de pollos, aristócrata o bombera… Por especular que no quede. ¡Sólo falta que digan que estuvo en un reality a lo Gandía Shore!

Hasta una página independentista catalana, El nacional.cat, le ha llegado a atribuir al soberano la paternidad de dos sobrinas, como en  los culebrones sudamericanos. Al  menos han tenido la decencia de no insinuar un incesto, sino un rollito cesto, a lo Moisés. Las habría tenido fuera del matrimonio, cuentan y se las habría pasado a sus hermanas para que las cuidaran. De creer tanta bobada, la potencia de los espermatozoides borbónicos estaría a la altura de los misiles transcontinentales. Andan los periodistas del corazón y los espectadores  de Sálvame buscando parecidos como locos después del aquelarre que se hizo con el nombre que escribió Antonio Montero en un papelito que quemaron ante las cámaras. Llegó a decir:

"Según las informaciones que yo tengo, no tiene una hija, puede tener bastantes más…Yo no puedo afirmar. Tengo algunas pruebas que se acercan mucho más a esa verdad que a otras cosas de gente que en un momento de mi vida….. He intentado contrastar esas pruebas y si la gente las viera diría, joder  qué más quieres tener. ¿Qué más quiero tener? El ADN", dijo.

Pues eso, solo el ADN puede demostrar una filiación. Porque lo de buscar parecidos es muy fácil. Que me perdone mi padre, a quien soy clavadita, pero yo misma, cuando se me caigan las muelas y los dientes, espero que dentro de cincuenta años, me pareceré a María Luisa de Parma, la que se lió con Godoy y si me apuras me daré un aire a la Infanta Elena.

Borja Thyssen, que es hijo seguro, seguro de Manolo Segura, se me parece a Carlos IV, y Quique San francisco, hijo del gran actor Vicente Haro siempre me recordó a Carlos III. Me viene a la memoria una anécdota protagonizada por una actriz y presentadora rubia de bárbaras y espectaculares piernas que en una fiesta nocturna iba acompañada por su hija y dicen que dijo: "Mírala, es Borbona, Borbona". Bobona bobona lo sería ella si pretendía que alguien diera crédito a su supuesta insinuación  porque la hija en cuestión es clavadita a su padre, del cual lleva el apellido. Esto ya no es de traca, es…¡De circo! Y el Rey parece que ha puesto uno y le han crecido los enanos.

¿Qué ha hecho el Rey para merecer esto? Desde aquí propongo que al grito de guerra de 'Tod@s somos hijos del Rey Juan Carlos', reivindiquemos la figura del rey emérito, tan baqueteada en los últimos tiempos, con una manifestación en el Pardo, entre los ciervos....

La Monarquía es lo único que puede mantener unidos a los españoles. Porque monárquicos, más o menos, los hay en toda España. Y yo soy monárquica por obligación, por ser cotilla profesional y porque vivo de esto, y porque me gusta la historia. Y aunque Luis XVI tuviera bastardos casi por decenas, de los que legitimó a ocho, esta no es la España del Rey Sol, sino un país a punto de ser achicharrado por la sequía y la crisis tras el procés. ¿Por qué Felipe VI permite que se hable así de su padre? Por egoísmo propio debería impedirlo. Un hermano o una hermana putativa son una grandísima putada. Se mire por dónde se mire. Si pasas de él o de ella te sientes mal, y si los admites en la familia, muchísimo peor. Tendrás que pasarle la ropa a la cuñada más pobre que tú y ya no podrás repetir vestido.  ¡Éramos pocos y parió el abuelo! No me imagino que en Zarzuela se pueda pronunciar una frase tan ordinaria.