Solo queda un mes para que Harry (35 años) y Meghan (36) se conviertan en marido y mujer. El próximo 19 de mayo la capital inglesa acogerá el enlace del año y de una de las realezas europeas que más adeptos tiene. Además, el hecho de que la contrayente 'provenga' de Hollywood otorga un más glamour al evento del que ya se presupone.
Todo está prácticamente listo para que el 'príncipe rebelde' y la 'estrella americana' se den el 'sí, quiero'. Por eso JALEOS ha recogido todos las claves que debes conocer antes de la celebración de la gran boda royal.
La hora y el lugar
A las doce del mediodía del tercer sábado de mayo Harry y Meghan estarán en la Capilla de San Jorge del Castillo de Windsor esperando que el arzobispo les una en santo matrimonio. Tras convertirse en marido y mujer habrá una procesión de carruajes a la una de la tarde alrededor de Windsor Town, y de la recepción en St George's Hall. Por la noche el Príncipe de Gales dará una recepción privada para los recién casados y sus allegados.
Los padrinos
Lo primero que ha de tenerse en cuenta es que en las bodas reales británicas no existe el rol del padrino sino que se les conoce como "partidarios o promotores". Aún así, Guillermo ya acabó con esa hermética regla y nombró a su hermano Harry padrino de su boda. No ha trascendido que el actual novio haya hecho lo propio, pero las apuestas se rigen por ese lado. Acompañando del brazo a Meghan estará su padre, pero este también se saltará lo establecido porque a pesar de tener la obligación de dar un discurso en la ceremonia, será la novia la que tome la voz para agradecer a la reina Isabel II su cariño y aceptación.
Los invitados
Harry y Meghan querían una boda íntima y solo para su círculo más cercano pero finalmente asistirán 600 personas, entre las que habrá familia y amigos de los contrayentes junto a celebrities, personalidades de la nobleza y compromisos por parte de Buckingham. Los rostros famosos que se podrán ver en la ceremonia serán los de compañeros de profesión de Meghan como a actriz Priyanka Chopra -gran amiga de la novia- y Patrick J. Adams, el prometido de Markle en la serie Suits; también artistas como Rihanna o el matrimonio Bekcham.
El vestido
En todo enlace es el secreto mejor guardado y para este no iba a ser menos. La tradición marca que el diseñador debe ser británico, pero, del mismo modo que ha ocurrido con otros pasos a seguir, puede que Meghan se salte también este punto. Las apuestas de los ingleses no descartan a Alexander McQueen, que es quien vistió a Kate Middleton, aunque las miradas están muy puestas sobre Elie Saab y Ralph and Russo, dos de las firmas favoritas de la novia.
La tarta
Claire Ptak es la pastelera elegida para que dé forma al postre de la gran boda. Ella es la dueña de 'Violet Bakery', un centro hostelero que Meghan conoce muy bien porque la entrevistó cuando tenía un blog de comida y viajes. La tarta tendrá un saber muy cítrico y un color muy vivo pues han escogido una mezcla de limón con flores frescas y crema batida. Aunque, tal y como ocurrió en la boda de Guillermo y Kate, lo más probable es que la que se reparta a los invitados sea una diferente.
El fotógrafo
Las imágenes del primer posado oficial tras comprometerse impactaron a todos por su estilo hollywoodiense y mucho más moderno de lo que nos tenían acostumbrados desde la Casa Real inglesa. Quien firmaba las fotos era Alexi Lubomirski y él ha sido también el elegido para inmortalizar los momentos de la ceremonia nupcial. El fotógrafo es natural de Botsuana, un lugar muy especial para los novios ya que es a donde hicieron su primera escapada secreta juntos y donde surgió el compromiso.
La florista
Las flores son un detalle muy cuidado por la realeza británica y en ese sentido han optado por una mujer que conoce muy bien el trato correcto a la decoración floral. Philippa Cradock es la florista encargada de dar color y vida al entorno que rodee a los novios en una fecha tan especial.
Las invitaciones
Todos estaban esperando que a sus buzones llegara una carta con remitente de Kensington. Y a quienes les llegó pudieron tocar el papel inglés y ver las letras de tinta americana, todo un guiño a la pareja que se darán el 'sí, quiero'. La imprenta que las ha creado es Barnard y Westwood, la empresa cabecera de la Casa Real británica desde 1985.
La cobertura mediática
Desde el comunicado oficial de palacio se ha hecho saber que se permitirá el acceso a una cámara que dará señal internacional para que se retransmita mundialmente por televisión. A pesar de que la pareja quería un evento íntimo y solo repleto de familiares y amigos cercanos, también quiere que el público que tanto les aclama viva con ellos esa especial cita. En ese punto medio están trabajando los expertos en comunicación de Kensington, para favorecer a ambas partes.
El ducado de regalo
La reina Isabel II, como ya lo hizo con el príncipe Guillermo, otorgará a modo de regalo de bodas un título nobiliario a los recién casados. A su nieto mayor y Kate Middleton les nombró duques de Cambridge, y en el caso de Harry y Meghan todo apunta a que les concederá el título de duques de Sussex, un título que no pertenece a nadie desde 1843.