Se acercan los días de descanso y las vacaciones para los reyes de España. Pero antes, Felipe VI (50 años) y Letizia (45) deberán responder a sus compromisos de agenda. El Rey tiene una recepción y posterior cena con el presidente francés Emmanuel Macron (40).
No se trata esta de una visita de Estado u oficial por parte del mandatario galo. La de Macron a España es una breve visita de trabajo, que cobra importancia al tratarse de su primera como presidente de la República Francesa. Según la agenda de Macron, está previsto que aterrice en Madrid el jueves a media mañana y vuele en dirección Portugal el viernes a primera hora.
Este mismo jueves 26 de julio, el rey Felipe ofrecerá una cena en el Palacio Real de Madrid para 80 invitados en honor a la presencia de Emmanuel Macron. En esta ocasión, y debido a lo apresurado y poco protocolario del encuentro, no lo acompañará su esposa, Brigitte (65), motivo por el que la agenda de Letizia ha permanecido intacta.
La situación de la soberana habría sido diferente si lo de Macron hubiera sido una visita de Estado. En ese caso, los Reyes, como anfitriones, habrían dispuesto los actos perceptivos que conforman la clásica ceremonia de bienvenida en el Palacio Real, momento de primer encuentro entre ellos y ellas; la cena de gala, incluyendo despliegue de vestidos largos y tiara (solo portada por la Reina); y como broche de oro, la recepción ofrecida por el presidente invitado, en honor y agradecimiento a los monarcas de España.
El viaje de Letizia a Oviedo
Sin mover un ápice de su dossier de actividades institucionales, Letizia viajará el mismo jueves hasta su patria chica, Asturias. En la capital, Oviedo, realizará su ya tradicional visita a las actividades de los cursos de verano de la Escuela Internacional de Música de la Fundación Princesa de Asturias. La Reina se encuentra inmersa en los preparativos previos a uno de los acontecimientos más relevantes a nivel internacional que nacen del seno de la Casa Real, los Premios Princesa de Asturias.
En esta ocasión, ahora más que nunca y si nada lo impide, Letizia comulgará con ruedas de molino, abrirá paso a la inmaculada generación de la familia real y aceptará que su primogénita, Leonor (12), emita su primer discurso como ya hiciera su marido, Felipe, a la misma edad.
Hasta donde se conoce, y a falta de confirmación oficial por parte de Zarzuela, la Princesa de Asturias participará en los actos de las conmemoraciones que tendrán lugar el 8 de septiembre día en Covadonga, lo que supondrá la primera participación de la princesa de Asturias en una visita oficial a esta Comunidad.
Un debut del que Letizia formará parte activa, aunque en la sombra, como ya hiciera el pasado 30 de enero, cuando el rey Felipe, coincidiendo con el día de su 50 cumpleaños, impuso a su hija mayor el Collar del Toisón de Oro.
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